EL COLOQUIO DE LOS PERROS
  • PRINCIPAL
  • CONTACTO
  • POESÍA
  • FICCIONES
  • ENTREVISTAS
  • TRADUCCIONES
  • ARTÍCULOS
  • LA BIBLIOTECA DE ALONSO QUIJANO
  • ESCRUTINIO DEL CURA Y EL BARBERO
  • MUSEO DE BARATARIA
  • HEMEROTECA
  • ÍNDICE DE AUTORES
  • JOAN MARGARIT: UNO DE LOS NUESTROS
  • DOSIER: 40 AÑOS DE LA OTRA SENTIMENTALIDAD
  • HOTEL VÍA LÁCTEA: JOSÉ ÓSCAR LÓPEZ
  • PRINCIPAL
  • CONTACTO
  • POESÍA
  • FICCIONES
  • ENTREVISTAS
  • TRADUCCIONES
  • ARTÍCULOS
  • LA BIBLIOTECA DE ALONSO QUIJANO
  • ESCRUTINIO DEL CURA Y EL BARBERO
  • MUSEO DE BARATARIA
  • HEMEROTECA
  • ÍNDICE DE AUTORES
  • JOAN MARGARIT: UNO DE LOS NUESTROS
  • DOSIER: 40 AÑOS DE LA OTRA SENTIMENTALIDAD
  • HOTEL VÍA LÁCTEA: JOSÉ ÓSCAR LÓPEZ
EL COLOQUIO DE LOS PERROS

ENTREVISTAS

PERSISTIENDO

RUBÉN ABELLA

14/3/2021

1 Comentario

 
Entrevista realizada por FLORENTINA CELDRÁN

Me reconozco maltrecha tras cerrar la última página de Quince llamadas perdidas (Algaida, 2020), la última obra del narrador vallisoletano Rubén Abella, que ha merecido el LV Premio Kutxa Ciudad de San Sebastián al mejor libro de relatos en castellano. Ha sido una lectura impactante, recorrida con avidez. Buscaba una muestra de esperanza, hasta que paré y vi con claridad que la esperanza estaba todo el tiempo presente, que es la lucha de sus protagonistas, y recordé algunos de los mejores relatos que había leído hasta el momento.

—EL COLOQUIO DE LOS PERROS: ¿De dónde beben tus “quince llamadas”, Rubén?
 
—RUBÉN ABELLA: Como el resto de mis ficciones, estos cuentos beben de tres fuentes principales: la memoria, la imaginación y el lenguaje. Sin memoria no hay nada. De ella forman parte mis experiencias, por supuesto, pero también las experiencias de los demás y lo que leo y lo que veo a mi alrededor y lo que me cuentan. La imaginación me permite convertir mis observaciones en historias posibles, que es la esencia de la narrativa. Y el lenguaje invita al lenguaje. A veces no sé lo que quiero contar hasta que lo escribo.
 
—ECP: Confieso que en el momento en el que empecé a ver las conexiones entre los relatos la lectura se volvió aún más intensa. ¿Esa estructura es algo premeditado o va surgiendo y haciéndose necesaria con el desarrollo de las historias?
 
—RA: Ambas cosas. La red de vasos comunicantes que sustenta el libro es fruto de la planificación y de lo que va surgiendo mientras escribo. Hay protagonistas que reaparecen como personajes secundarios en historias que no son las suyas. Hay hilos narrativos que se interrumpen para resurgir y resolverse varios cuentos más adelante. Hay acciones cuyos efectos se descubren en relatos distintos de aquellos en los que se llevan a cabo. Me parece que este tipo de estructura enriquece el conjunto. Lo convierte en un organismo vivo, dotado de una morfología interna que le proporciona cohesión, complejidad y, en última instancia, sentido. Yo no he inventado nada, que conste. Hace más de un siglo que Sherwood Anderson publicó Winesburg, Ohio, un libro de cuentos entrelazados al que debo mucho y que siempre me ha servido de inspiración.
 
—ECP: En un momento como el actual, donde las ciudades están siendo cuestionadas, donde parece necesario un replanteamiento del modelo urbano, Madrid aparece con toda su potencia como parte de las historias. ¿Es la ciudad el mejor escenario para el fracaso, para la lucha?
 
—RA: Siempre he vivido en ciudades, por lo que es el escenario que mejor conozco. Además, hay que tener en cuenta que para que una historia avance debe contener un conflicto, y eso —el conflicto— es algo que abunda en las urbes. Pero, por supuesto, puede darse también en otros lugares. Para ello sólo hacen falta dos seres humanos. A veces incluso con uno basta. Escribo esto último pensando en novelas como El desierto de los tártaros de Dino Buzzati o Una soledad demasiado ruidosa de Bohumil Hrabal, ambas construidas alrededor de un solo personaje.
 
—ECP: Todos los relatos son piezas preciosistas, pulidas, depuradas, donde no sobra nada. Creo que el trabajo de contención y de corrección es espectacular. ¿Qué importancia le das en el proceso creativo?
 
—RA: Gracias. La corrección es para mí la fase más placentera de la escritura. La trama ya está tejida, con todo el trabajo que eso supone, y puedes dedicarte a pulir, a mimar los detalles, a iluminar conexiones dentro del texto que antes, cuando estabas ocupado levantando la historia, te pasaron desapercibidas. Además, me horroriza aburrir, lo que me lleva a ser contenido. Escribir es tender con el lenguaje un puente entre nuestra mente y los lectores, y las palabras de más debilitan la estructura. Cuando le preguntaban acerca de su uso del lenguaje, Miguel Delibes respondía que escribía con las palabras que son. Salvando las distancias, yo trato de hacer lo mismo.
 
—ECP: En dos de tus novelas anteriores, California y Baruc en el río, el recuerdo era una pieza fundamental. En este libro el recuerdo vuelve a estar muy presente. ¿Hay temas que te obsesionan, que te persiguen?
 
—RA: Varios. Uno, como bien dices, es la memoria. Me obsesiona hasta tal punto que le he dedicado tres novelas: las dos que mencionas y una tercera, Dice la sangre, aún inédita. La memoria es caprichosa y muy creativa. Rellena con material propio los huecos que deja el olvido —es aterrador pensar en la cantidad de cosas que olvidamos— y colorea a su gusto lo demás. Es también un mecanismo de defensa que nos protege, al menos en parte, del lado doloroso de la vida. Otros temas que me fascinan son la familia, el engaño, las desavenencias entre la realidad y el deseo, las relaciones de pareja y ese anhelo tan esquivo que llamamos felicidad.
Imagen
Imagen
Rubén Abella (Rosa Jiménez)
Imagen
—ECP: Hay relatos contados a través de distintas miradas, distintas perspectivas. Todavía estoy digiriendo el impactante ‘Jackpot’. Otros relatos presentan una visión más intima... ¿Cómo prefieres la descripción, desde una mirada interior o desde miradas externas?
 
—RA: Depende de la historia y de la sensación que me interese transmitir con ella. Las voces narradoras en primera persona te susurran al oído. Suenan como la de un amigo contándote una confidencia en un rincón apartado de un bar. Las voces en tercera persona —y por lo tanto externas— son menos íntimas, pero te permiten decir cosas que quedan fuera del alcance de las miradas interiores. Al final, como todo en la vida, se trata de sopesar los pros y los contras. Quince llamadas perdidas es un laberinto de miradas que se cruzan.
 
—ECP: Y el dolor y la lucha... ¿Crees que es más fácil conectar con los perdedores?
 
—RA: En la famosa primera frase de Anna Karenina, Tolstói dice: «Todas las familias felices se asemejan; cada familia infeliz es infeliz a su modo». Como ser humano quiero ser feliz y, además, quiero rodearme de personas que también los son. Como escritor, sin embargo, la infelicidad me resulta mucho más interesante. ‘En la orilla’, uno de los cuentos del libro, tiene como protagonista a una anciana que hace inventario de su vida mientras las olas del mar la ahogan y su hija, su yerno y sus nietos la observan muertos de risa desde la playa. En ‘Maquetas’ un aficionado a las maquetas de barcos es testigo desde el balcón de cómo un hombre agrede a su novia. El dolor, la lucha, la frustración, los retos y los dilemas morales de los personajes generan en el lector empatía y ganas de saber cómo saldrán del atolladero. Esto es así desde Aristóteles.
 
—ECP: En Ictus, otro de tus libros anteriores, el tema central era la búsqueda de la felicidad. ¿Tú dirías que ese es también el común denominador de las “llamadas”?
 
—RA: Sin duda. Los protagonistas de Ictus se sienten decepcionados porque, pese a haber respetado las reglas del juego —las que nuestra sociedad impone— no encuentran el futuro prometido. Esas son las aguas movedizas en las que chapotean. Por su parte, los de Quince llamadas perdidas tratan de escapar del marasmo en que se han convertido sus vidas, una tela de araña hecha de errores propios y ajenos que amenaza con destruirlos. La grandeza de unos y otros reside en intentarlo, en no dejarse vencer por la corriente, en luchar a brazo partido para lograr que lo que son y lo que quieren ser coincida. ¿No es eso lo que hacemos todos?
 
—ECP: En arquitectura la clave de bóveda es la pieza sobre la que se sostiene la estructura. En este libro que gira como un caleidoscopio ofreciendo distintas miradas, ¿nos hablas de tu clave de bóveda?
 
—RA: Desde un punto de vista formal, la clave del libro es el cuento que mencionaste antes: ‘Jackpot’. Tiene cinco partes y es el número siete de los quince que tiene el libro. Se trata, por tanto, de una estructura redonda y simétrica, ideal para sostener un entramado narrativo. A nivel conceptual la clave sería el título del libro, que es también el de uno de los cuentos. En él, un adolescente despierta aterido a la orilla del río Manzanares después de pasar la noche drogándose y bailando en la sala La Riviera de Madrid. Al sacar el móvil del bolsillo, descubre quince llamadas perdidas de sus padres. Se va a casa a pie, pensando que el paseo le ayudará a entrar en calor y a prepararse para la bronca inminente. Al igual que esas llamadas paternas no contestadas, los cuentos del libro constituyen, a nivel simbólico, quince aldabonazos en la puerta de los lectores, quince timbrazos sin respuesta.
 
—ECP: Al acabar una entrevista tendría que desearte suerte, pero estoy segura de que será así, como lo ha sido hasta ahora, y la prueba está en tus numerosos premios. Yo quiero darte las gracias por esta fotografía en gran angular sobre estas vidas pequeñas, que son una prueba de la grandeza de la lucha cotidiana. Y quiero meterte prisa, queremos otro libro de relatos o una nueva novela de Rubén Abella.
 
—RA: Gracias a vosotros por prestar atención a mis ficciones.
1 Comentario

MARKEL HERNÁNDEZ PÉREZ

13/3/2021

1 Comentario

 
Entrevista realizada por ANTONIO MARÍN ALBALATE

Vivir de alquiler


Markel Hernández Pérez (Arrigorriaga, 1997) es graduado en Filología Hispánica por la Universidad de Salamanca y máster de Estudios Literarios y Teatrales por la Universidad de Granada. Ha colaborado con diversos grupos de teatro en Bilbao, Salamanca y Granada, y en las tres ciudades ha podido estrenar varios de sus textos dramáticos de pequeño formato: La noche de los sueños imposibles, Las voces pervertidas y Como si fuera una obra de teatro. También destaca en su microteatro la pieza Tabú: las cosas que nunca dijimos.
En 2020 su obra Vivir de alquiler ganó el LV Premio Kutxa Ciudad de San Sebastián en su modalidad de teatro en castellano, que acaba de ver la luz en la editorial Algaida.

—EL COLOQUIO DE LOS PERROS: Naciste el año en que a Dario Fo le concedieron el Premio Nobel de Literatura. Bonito año, por tanto. Markel, ¿qué ha supuesto para ti recibir este galardón Ciudad de San Sebastián?
 
—MARKEL HERNÁNDEZ PÉREZ: Siempre me ha gustado esa coincidencia, aunque lo cierto es que no me interesa tanto el Fo dramaturgo (con siempre Franca Rame detrás) como el Fo actor, con toda la recuperación de la tradición de la comedia del arte que llevó a cabo. Recomiendo mucho su Manual mínimo del actor.
El premio me ha ayudado a (paradójicamente) ayudar a pagar los gastos del alquiler. Fuera de eso, me ha permitido comprar todos los libros que quiera sin tener que cuidar su precio y, a la hora de crear, ha supuesto la satisfacción tan buscada durante largo tiempo, esa palmadita en la espalada que me dijera «sigue así, vas bien, no desistas».
 
—ECP: Vivir de alquiler transcurre dentro de una casa. Una casa que, como leemos en “Nota sobre el espacio”, puede no serlo. El periodista Adri Fauro dice que «Vivir de alquiler es la historia de un silencio». ¿Qué papel juega el silencio en esta pieza?
 
—MHP: Confieso que no valoré tanto el peso de este elemento hasta que otros leyeron la obra y lo señalaron como central; para mí sencillamente era una pieza más. El silencio es el motor de arranque. Es una criatura bicéfala: por un lado, está el silencio relacional entre los personajes; por otro, el silencio físico en la casa. Si se materializara, está claro que sería una bestia creciente, de escena a escena va naciendo desde los intersticios y termina por devorarlo todo a su paso. Hay que tener mucho cuidado con el silencio.
 
—ECP: Esta historia de perdedores es un fiel reflejo del drama de los desahucios. Los bancos, amparados en las leyes de un sistema de capitalismo salvaje, se adueñan de quienes hipotecaron su vida y su casa tratando de seguir adelante en una sociedad cada vez más deshumanizada e insolidaria. ¿Qué habría que cambiar para que historias como la que cuentas dejaran de ser una realidad tan dramática?
 
—MHP: No pienso que mi obra sea una historia de perdedores o, desde luego, no es eso lo que pretendía. ¿Por qué intentar sobrevivir al sistema actual es ya una batalla perdida? Hay muchas victorias en la vida cotidiana que ni el capitalismo puede arrebatar.
La realidad de los desahucios es (y no hay otra palabra) una mierda. Incluso en la crisis de la pandemia se han llevado desahucios por todo el país, sin piedad pero con mascarilla. ¿Quién teme al coronavirus si tienes a la policía en la puerta de tu casa para sacarte de ella? La rueda ha seguido girando hasta que Podemos no exigió el cese de los desahucios hasta el fin del estado de alarma. Lo único que se podría hacer es que salga adelante de una vez la Ley de Vivienda.
 
—ECP: ¿Cómo nace Vivir de alquiler en tu imaginación dramatúrgica? ¿Cómo la concibes teatralmente?
 
—MHP: Empecé a escribir la obra cuando el casero de hace un año nos comunicó a los del piso que tendríamos que abandonarlo el próximo curso porque lo convertiría en un apartamento turístico. Esa imposibilidad de habitar el lugar estalló en mí. Mi cabeza conectó este hilo con otro, uno más antiguo: la relación de dos personas de mi familia. La dramaturgia empezó a encajar. Entré en una rutina de escritura a la que desgraciadamente no he vuelto. Me levantaba pronto por las mañanas y escribía durante horas, comenzaba líneas que después no me convencían, me quedaba en blanco y, aun así, seguía. Entonces, otros acontecimientos históricos reclamaron mi atención: la exhumación de Franco y el Procés. ¿Podría encajarlo en la obra? Probé. Clack. Como un guante.
Hablar de la historia de los lugares te lleva a hablar de la vida de las personas que los habitan y eso te lleva a hablar de la historia, es inevitable.
Si algo sabía con certeza, es que quería escribirlo más allá de la convención de que la literatura dramática tenga que materializarse en el teatro. ¿Y qué si jamás se representaba? Tenía que buscar la fórmula para que pudiera funcionar en el formato libro o que se leyera (casi) como una novela. Su teatralidad responde a mi idea de teatro: sin ningún aparataje operístico, posmodernismo teatral (¿qué es eso de seguir produciendo obras que podrían no exceder a la mitad del siglo XX?), retiré las acotaciones tan molestas, las didascalias servirían para la visualización, mezclar lenguajes y distintos niveles de ficción, estructuras dramáticas diversas...
Imagen




Imagen
Imagen
(Foto de Santiago Farizano)
—ECP: Los doce capítulos de esta obra están precedidos por citas de poetas. En el primero hallamos a Ada Salas y en el último a Antonio Gamoneda. Y ambos escribiendo acerca del silencio. Salas dice: No creía posible este silencio. / No hay nada aquí. / Una extensión abierta donde todo / podría consumarse. Y Gamoneda afirma: Ahora / se abre ante mí un silencio que se excede; es ciertamente / un silencio excesivo; es perfecto en su especie. Toda una poética para darle más solidez, si cabe, al argumento de esta obra. ¿Te obsesiona el silencio?
 
—MHP: Quería crear un vestíbulo a cada escena, encontrar los versos o frases que pudieran condensar su esencia. Creo que la que más resume el argumento de la obra no son los relacionadas con el silencio, sino la inicial de Sergio Blanco (¿Por qué estamos acá? / Por eso mismo. Porque nada es cierto. / Porque todo es mentira. Porque nada es verdad.), que reitera la teatralidad de la ficción.
El silencio me obsesiona, sí, quizá más en aquel momento de creación que ahora, cuando ya he aprendido que hay silencios con los que estamos obligados a convivir. Nada puede hacerse.
 
—ECP: Te mueves entre la narrativa, la dramaturgia y la poesía. ¿Tienes preferencia por alguna en concreto o las tres te llenan por igual? ¿Eres un escritor “todoterreno”?
 
—MHP: Ese todoterreno tendría un par de ruedas pinchadas.
Siempre he combinado la prosa y la poesía, según lo que me interese escribir en un instante, pero en ninguna he llegado a trascender. Encontré en el molde dramático una cantera de posibilidades literarias y realmente me sorprendió tener éxito ahí. Desde la concesión del premio, he centrado casi toda mi creatividad (y mis lecturas) en el teatro y he dejado un poco de lado las otras.
 
—ECP: ¿Qué autores teatrales en español o en otras lenguas han sido tus maestros?
 
—MHP: No llamaría maestro a nadie, he aprendido más de lo que no me gusta que de lo que me gusta. En cualquier caso, por decir algunos: el teatro de Lorca (o sea, el bueno: El público, Así que pasen cinco años, Comedia sin título), Gracia Morales, Jaime Chabaud, la primera Liddell y el primer Mayorga, Pablo Remón, Lola Blasco; y en dirección teatral: Miguel del Arco, Ramón Barea o Ricardo Iniesta.
Más allá de nuestra lengua: Bernard-Marie Koltès, Shakespeare, Artaud, Sarah Kane, Dorota Masłowska, Brook, Eurípides, Wajdi Mouawad, Beckett o Ionesco.
 
—ECP: ¿Has vivido de cerca algún desahucio o has estado evitándolo en primera línea de protesta?
 
—MHP: No.
 
—ECP: Paralelamente al desahucio de esta familia acontece el de la momia de Franco y sus nostálgicos manifestándose en ese monumento al horror llamado el Valle de los Caídos. En el capítulo ‘Los restos’ el personaje de Sergio dice: «España no lo sé, pero Franco al menos sí está muerto». Y Juani le recuerda: «No, hijo. Franco está más vivo que nunca». ¿Cómo se entiende, si es que puede hacerse, que gente joven como tú —no es tu caso, afortunadamente— apoye el golpe militar que diera en su día un dictador asesino que todavía sigue teniendo una fundación que lleva su nombre?
 
—MHP: Me decepciona profundamente lo fuerte que ha arraigado la ideología facha en la gente joven. Me da miedo. Pienso en la cantidad abrumadora de jóvenes que se dejan llevar por el odio, los valores tradicionales, la xenofobia, la supremacía económica, todo eso sin cuestionamiento crítico. Pienso en la superestrella del fascismo, Isabel Peralta. Hoy en día existe una infinita facilidad para estar informados, donde nosotros escogemos qué nos interesa saber y qué ignoramos, pero esto no es una cuestión de ignorancia. Hay fachas intelectuales y son precisamente ellos quienes han conseguido institucionalizar su discurso.
 
—ECP: ¿En qué proyectos teatrales andas metido ahora?
 
—MHP: Estoy pendiente de que me confirmen la fecha para poder estrenar Vivir de alquiler, a pesar de que es complicado organizar una actividad cultural en un futuro próximo con el riesgo de que pueda cancelarse por la pandemia. Nada me gustaría más que verla sobre un escenario, pero en estos tiempos es difícil. Si no eres nadie (como yo), los gestores culturales arriesgan lo mínimo. Por lo demás, estoy terminando de escribir otro proyecto con el que llevo trabajando desde verano, creo que merece la pena, y si no, al menos me ha divertido. A este le espera lo de siempre: el insidioso ciclo de presentar la obra a un concurso, esperar el resultado, fracasar, repetir el proceso.
1 Comentario

RAFAEL LÓPEZ VILAS

13/3/2021

5 Comentarios

 
Entrevista realizada por MANUEL JESÚS SORIANO PINZÓN

Tierra quemada
Hay algo de cierta frescura e irreverencia poética en Rafael López Vilas, ese modo de tejer lo altivo con lo mundano. Hablar del país, de los bares, de su ciudad, y después vomitar versos y palabras sobre los pies de cartón, los sin techo, los vagabundos, los oprimidos por la sinrazón de la vida, los sin voces que juegan a la rayuela y cuentan los pasos por las calles angostas y frías de la urbe, mientras esperan la noche para ser devorados por los lobos que acechan, mientras los que tenemos voz dormimos entre almohadones y colchas acaudaladas. Ahora, en su novela Tierra quemada (Versátiles, 2020) nos habla de la desigualdad, la ruina, la corrupción y las fortunas alejadas de lo ajeno.

—EL COLOQUIO DE LOS PERROS: Una de las cosas que más llama la atención de su novela es el título, Tierra quemada. ¿Cuánto hay de «pandemia» en esta novela?
 
—RAFAEL LÓPEZ VILAS: El título de este libro alude a esa táctica militar consistente en la destrucción de todo cuanto pueda ser de utilidad al enemigo cuando uno de los contendientes se retira o avanza a través del territorio del oponente. Tierra quemada bucea en el desolador escenario de la sociedad española tras la crisis del 2007 y hace un descarnado retrato de los despojos de las víctimas del desastre. Como ciudadanos, nos hemos acostumbrado a que los responsables de esa clase de catástrofes no sólo no paguen por sus crímenes, sino que, además, disfruten de una vida sufragada a costa del sufrimiento y de las vidas de muchas personas, con impúdica comodidad. Es una historia que se repite y, hasta la fecha, el ser humano no ha dado muestra alguna de tener intenciones de buscar una vacuna.
 
—ECP: En su libro, con un discurso de acervo contemplativo, aborda poéticamente conceptos como la conciencia, la alteridad de sí mismo o la construcción del yo. ¿Deja lugar a la ficción?
 
—RLV: Por supuesto. Esa conciencia o ese “yo” al que aludes, no me pertenecen, y sus vivencias, sus preocupaciones y su forma de afrontar la vida tampoco son las mías. La familiaridad que resuena en esta novela no debe confundirse con falta de ficción. Esto no es un reportaje periodístico, ni un documental. Obviamente está ambientada en una crisis que aplastó el país. En su corrupción política. Es un hecho real que nos ha jodido la vida a muchos. Esa construcción del “yo”, en realidad, es la construcción del “tú” y también del “él”, porque esta novela versa sobre un “todos nosotros” que yo, como escritor, a través de mi percepción de la realidad, sólo puedo imaginar. Es realismo social, sí, pero también una ficción jodidamente real a la que he dado vida a través de los personajes de la novela. En cualquier caso, creo que es bueno que el lector se vea reflejado o que crea conocer personas así, y sería mejor todavía que no las olvidasen.
 
—ECP: Poesía, novela, El Lobo, Rafael, ¿Doctor Jekyll y el señor Hyde?
 
—RLV: No lo creo. No hay nada que El Lobo hiciese a lo que Rafael no estuviese dispuesto y viceversa. El Lobo está aquí, es ese tipo que se sube al escenario que sabes que no va a dejarte indiferente. Es el tío que empuña el látigo, el que vierte limón en la herida y te retuerce el estómago porque no ha venido a agradar. Rafael no es distinto, pero no se patea los escenarios. Sabe lo que hace y del modo en que lo hace, y es consciente de la demasiada exposición y los riesgos que tiene decir las cosas que dice del modo en que las dice. Lógicamente, una novela y un poemario no comparten las mismas reglas y no parten del mismo lugar, aunque el fulano que las escribe, en este caso, sí. De todos modos, El Lobo y Rafael no prescriben paños calientes ni frascos de mercromina.
 
—ECP: ¿Qué nos quiere contar en Tierra quemada?
 
—RLV: Con la trascendencia que tuvo la crisis de 2007 en la vida de los españoles, llama la atención que la narrativa de este país haya pasado de puntillas sobre una época que marcará nuestro futuro durante décadas. Generaciones de escritores anteriores a la mía no han desenfundado el bolígrafo, y las más jóvenes tampoco lo han hecho. La poesía, en cambio, sí ha demostrado un interés y un compromiso mayores con el asunto. A mí, me interesaba escenificar cómo la crisis y la manera de gestionarla del gobierno español de entonces hundieron en la miseria a la clase trabajadora y a los más desfavorecidos, mostrando, además, la obscenidad con que el partido del gobierno y muchos empresarios poderosísimos se repartían el pastel mientras no dejaban de repetir que vivíamos por encima de nuestras posibilidades. Lo peor, sin embargo, no es que lo dijesen y lo repitiesen hasta el hartazgo, lo peor es que agachamos la cabeza y nos lo creímos.
Imagen
—ECP: ¿Escribir es un alimento y una necesidad?
 
—RLV: Siempre he pensado que ese tipo de frases resultan rimbombantes y plagadas de afectación. El arte, la literatura, la poesía, rebosan de eslóganes que alimentan una mística y una magia de la que carecen la mayoría de los actores que trabajan en ellas. Hay muchos escritores que visten su personaje de esa guisa y adornan su labor con frases así. En la mayoría de los casos, es sólo pantomima, aunque queda bien decirlo y le confiere a dicho individuo cierto aire de distinción que, en parte, disimula su falta de talento. A mí escribir es lo que más me gusta. Lo que quiero hacer todo el tiempo que pueda y mientras quiera hacerlo. Pero alimento y necesidad son otra cosa. Necesidad es que tu hermana pase sin comer para darte de comer a ti. Necesidad es tener plásticos en lugar de cristales en las ventanas. Yo he tenido esa hermana y esas ventanas. He tenido que trabajar durante años para poder malvivir. ¿Que querría haber estado toda la vida escribiendo? Pues claro...
 
—ECP: ¿Qué opina de la novela y la poesía actuales?
 
—RLV: Cuando desembarqué en Madrid en 2000, me encontré una ciudad plagada de un montón de gente pastando en el campo de la creación, aunque la calidad de la leche, en general, dejaba bastante que desear. Entonces no existía la fiebre que hay hoy con las redes sociales. Creo que las redes son un factor que ha transgenizado el carácter del forraje, y que la calidad de literatura y poesía que se publica en las editoriales también es peor. La mayor parte de las veces que vago por una librería tengo la sensación de deambular por el desierto. Claro que de vez en cuando me encuentro con alguna cosa interesante, y cuando sucede es como tener una inesperada erección. He leído muchos de los libros de las nuevas voces que han conquistado el estante librero y en su mayoría me resultan de una intrascendencia insoportable. También es cierto que soy bastante pejiguero y un poco gilipollas a la hora de contentar...
 
—ECP: ¿Necesita alimentarse del recital poético y ver al público expectante a cada palabra que suelta con pasión, y algunas veces, con disparidad?
 
—RLV: Ciertamente que no. Cuando subo a un escenario no disfruto en absoluto recitando. Es una forma de darse a conocer y que el personal escuche tu trabajo. Lo mismo puedo decir de los lectores. Por supuesto, me alegra que disfruten con mi trabajo, pero eso es algo que ya nada tiene que ver conmigo. Mi disfrute ya sucedió cuando escribí lo que recito o el libro que tienen entre manos. Soy egoísta y disfruto en soledad de ello. Es un ejercicio de onanismo puro y duro, lejos del mundanal opinario. No se trata de una pose ni del discurso hipócrita de un personaje. Las felicitaciones, los aplausos, las emociones que puedo inferir en el lector/espectador, personalmente me resultan indiferentes, y creo que, de no ser así, empezaría a intentar complacer a los demás escribiendo lo que se supone que esperan de ti y sería el principio del fin, porque esto va de lo que yo quiero decir y no de lo que tú esperas escuchar. Los aplausos, las buenas críticas, ayudan a vender libros, pero a veces ni siquiera eso.
 
—ECP: En el prólogo del escritor Adolfo Gilaberte, éste dice: «La realidad que cuenta esta novela no es elegante ni sofisticada, no, es del color del hierro y del sudor, huele a días y noches sucesivos al borde del sumidero, sabe a cañerías y a sopa de sobre». ¿Cuántas noches de insomnio, de lágrimas vertidas y de querer borrarlo todo ha pasado creando Tierra quemada?
 
—RLV: Una vez publicada, el grueso de la novela ha supervivido sin contratiempos a las correcciones, y pude terminar de escribir el libro sin derramar ninguna lágrima ni padecer insomnio alguno. Aun así, en muchos aspectos, no fue un libro fácil de escribir porque, precisamente, más allá de la tramoya de corruptela y depravación político-empresarial del decorado, Tierra quemada habla de un país plagado de gente arrasada por las urgencias y la necesidad. Gente que lo han perdido o le han quitado todo. Enfermos que mueren en un pasillo esperando la atención de un médico que nunca llega. Personas que trabajan para ser pobres. Indigentes que no son considerados ni siquiera bestias de carga y que son arrojadas a la marginalidad del olvido como si fuesen basura. No obstante, sí que hay un personaje, el de María Olmedo, cuya historia es una tragedia mayúscula y su escritura fue, sin duda, lo más difícil que he tenido que escribir nunca.
 
—ECP: Si antes de la pandemia había desigualdad: ¿cómo lo ve desde ese punto, irreverente, del que acentúa sus palabras?
 
—RLV: Como dices, necesidades y desigualdad ya estaban ahí antes de la pandemia. La covid ha tensado la cuerda y acentuado la indecencia de la situación de miles de personas en este país. Esta es la basura que hemos consentido. Durante los dos últimos gobiernos del PP, el desencanto y la abulia de gran parte de la población permitieron el desmantelamiento y el saqueo sin precedentes de las arcas públicas y el estado del bienestar sirviéndose de una crisis económica como coartada. La respuesta de aquel gobierno fue ideológica, una respuesta con absoluta conciencia de clase, en este caso, de las elites económicas, que se sirvieron del PP y del dominio de los medios de comunicación para minimizar el poder de la clase trabajadora y sufragar sus pérdidas. No obstante, la desigualdad no es la única que goza de que la sociedad española mire hacia otro lado. Igual ocurre con la violencia machista, con el cambio climático, la revitalización del franquismo o averiguar quién demonios es M. Rajoy.
Imagen
Imagen
Imagen
—ECP: ¿Próximos proyectos?
 
—RLV: Dada esta interminable pandemia, predecir el siguiente paso sería casi un ejercicio de vaticinio de fin de carrera. Por el momento, continuaremos con la promoción de Tierra quemada, y con suerte, quizá antes de fin de año, se publicará Vosotros, el Pueblo: poemas anti-sociales, finiquitando así mi Bilogía obrera. Hasta entonces, seguiré con la novela y el poemario en los que estoy trabajando, y me sentaré a esperar, con permiso de mi editor en Versátiles, José Ángel Garrido, a que alguien en Mondadori o Anagrama levante el teléfono y me llame...  

Dejamos la charla, con pena, mientras sigue oliendo a tierra quemada por las calles lluviosas de la ciudad alejada del bullicio de antaño.
Gracias, amigo Rafael, el Lobo irreverente...
5 Comentarios

    ENTREVISTAS

    El Coloquio de los Perros.
    Revista de Literatura.
    ISSN 1578-0856

    3SPADA
    ABAD, TRIFÓN
    ACERETE, ALBERTO
    ADALID, LUIS G.
    ADÓN, PILAR
    AGUILAR RODRÍGUEZ, ANTONIO
    ALBARRACÍN, JAM
    ALCOLEA, MARINA
    ARBILLAGA, IDOIA
    ARMENTA MALPICA, LUIS
    BALLESTERO, SALOMÉ
    BASCUÑANA, RAMÓN
    BATRES, IZARA
    BEATRIZ, JUAN [de]
    BELLIDO, ÁLVARO
    BELLIDO, ÁLVARO
    [Spam]

    BELTRÁN VERDES, ESTEBAN
    BERMÚDEZ OLIVARES, JOSÉ JOAQUÍN
    BERNAL, ADRIÁN
    BLANDIANA, ANA
    BOCANEGRA, JOSÉ
    BORGOÑÓS, IGNACIO
    BORGOÑÓS, IGNACIO
    [Un hombre desnudo]

    BUSUTIL, GUILLERMO
    CABEZAS, ISMAEL
    [Música que escucharé cuando hayas muerto]

    CABEZAS, ISMAEL

    CAMARASA, RAFAEL

    CANO, LEONARDO

    CARBAJOSA, NATALIA

    CARBAJOSA, NATALIA
    [traducir... poesía]


    CARIDE, ALBERTO

    CARRILLO, MARÍA ENCARNACIÓN

    CARRILLO, VIRIDIANA

    CASTRO, JUANA

    CÉLINE

    CEREZUELA, ANA

    CERVERA, RAFA

    CHEJFEC, SERGIO

    CHEJFEC, SERGIO
    [5]

    CHESSA, ALBERTO

    CHESSA, ALBERTO
    [Anatomía de una sombra]


    CHESSA, ALBERTO
    [Non finito]


    CHICO, ÁLEX

    CISNERO, ALBERTO

    COMAN, DAN

    CONTRERAS, NADIA

    CORTINA, ÁLVARO

    CRUZ, GINÉS

    DELGADO, DESIRÉE

    DÍAZ, ANA CLAUDIA

    DÍEZ, JOSÉ MANUEL

    DOMINIQUE A

    ELENA PARDO, CRISTINA

    ELKOURI, RIMA

    ESPEJO, JOSÉ DANIEL

    ESPEJO, JOSÉ DANIEL
    [Perro fantasma]


    FONT, VIOLETA

    GAIRÍN, RAMIRO

    GALÁN, JULIO CÉSAR

    GALÁN MOREU, SALVADOR

    GALÁN MOREU, SALVADOR
    [No fall]


    GALINDO, BRUNO

    GALLARDO, JOSÉ MANUEL

    GALLUD, EVA

    GALVÁN, ANI

    GAMBOA, JEYMER

    GARCÍA, CONCHA

    GARCÍA, DIEGO L.

    GARCÍA JIMÉNEZ, SALVADOR

    GARCÍA LÓPEZ, ERNESTO

    GARCÍA MELLADO, ISABEL


    GARCÍA-VILLALBA, ALFONSO

    GARCÍA-VILLALBA, ALFONSO
    [La nueva subjetividad]


    GARRIDO PANIAGUA, RODRIGO

    GASS, CARLOS

    GERANIOS, ANA

    GINÉS, ANTONIO LUIS

    GINÉS, ANTONIO LUIS
    [Antonov]


    GÓMEZ, MACARENA

    GÓMEZ BLESA, MERCEDES

    GÓMEZ RIBELLES, ANTONIO

    GÓMEZ RIBELLES, ANTONIO [QUIROMANTE]


    GONZÁLEZ LAGO, DAVID

    GRACIA, ÁNGEL

    GROZO, DANIEL

    GUERRA NARANJO, ALBERTO

    HENDERSON, DAIANA


    HERNÁNDEZ, GALA

    HERNÁNDEZ, JULIO

    HERNÁNDEZ, MIGUEL ÁNGEL

    HERNÁNDEZ, MIGUEL ÁNGEL
    [EL DOLOR DE LOS DEMÁS]


    HERNÁNDEZ, MIGUEL ÁNGEL
    [ANOXIA]


    HERNÁNDEZ, MIGUEL ÁNGEL
    [TIEMPO POR VENIR]


    HERNÁNDEZ, MIGUEL ÁNGEL
    [YO ESTOY EN LA IMAGEN]

    HERNÁNDEZ BUSTO, ERNESTO

    IRIBARREN, KARMELO C.

    JORGE PADRÓN, JUSTO

    JUAN, MIGUEL (de)

    KASZTELAN, NURIT

    LADDAGA, REINALDO

    LARA ALBERCA, JOSÉ MANUEL

    LAYNA RANZ, FRANCISCO

    LEZCANO, YULEISY CRUZ

    LINAZASORO, KARLOS

    LLOR, DOMINGO

    LOBATO, FLORA


    LÓPEZ, PABLO

    LÓPEZ AGÜERA, FULGENCIO ANTONIO

    LÓPEZ BRETONES, JOSÉ LUIS

    LÓPEZ KOSAK, ANDREA

    LÓPEZ MONDÉJAR, LOLA

    LÓPEZ MONDÉJAR, LOLA
    [Qué mundo tan maravilloso]


    LÓPEZ PELLICER, PABLO

    LÓPEZ POMARES, ALEJANDRO

    LÓPEZ SANDOVAL, DAVID

    LÓPEZ SORIA, MARISA

    LOUZAO, ALICIA

    MACHUCA, LUIS

    MAESTRO, JESÚS G.

    MALAVER, ARY

    MANUELA, ADRIANA

    MARGARIT, LUCAS

    MARÍN, MARÍA

    MARÍN, MARÍA
    [Lo que se hunde]


    MARÍN, MARIO

    MARÍN ALBALATE, ANTONIO

    MARQUARDT, ANJA

    MART, BLANCA

    MARTÍ VALLEJO, MAITE

    MARTÍN, RUBÉN

    MARTÍN GIJÓN, SUSANA

    MARTÍN IGLESIAS, VÍCTOR

    MARTÍNEZ CASTILLO, ANA

    MARTÍNEZ MÁRQUEZ, ALBERTO

    MENDOZA, NURIA

    MESA, SARA

    MICÓ, JOSÉ MARÍA

    MIGUEL, LUNA

    MIRALLES, INMA

    MOGA, EDUARDO

    MOLINO, SERGIO (DEL)

    MONTEVERDE, JULIO

    MONTEVERDE SÁNCHEZ, CONCEPCIÓN

    MOR, DOLAN

    MORALES, JAVIER

    MORANO, CRISTINA

    MORENO, ANTONIO

    MORENO, ELOY

    MORENO, JAVIER

    MORENO, SEBASTIÁN

    MORENTE, ESTRELLA

    MOYA, MANUEL

    MUÑOZ, MIGUEL ÁNGEL

    NAVARRO, ÓSCAR

    NETO DOS SANTOS, MANUEL

    NIETO, LOLA

    NORDBRANDT, HENRIK

    NUÑO, SIHARA

    OLMOS, ALBERTO

    OREJUDO, ANTONIO


    ORTIZ, DEMIAN

    ORTIZ ALBERO, MIGUEL ÁNGEL

    PALOMEQUE, AZAHARA

    PAPELES DEL NÁUFRAGO
    [Antonio Lafarque y Aníbal García]


    PARDO VIDAL, JUAN

    PARRA SANZ, ANTONIO

    PARRA SANZ, ANTONIO
    [Gómes & Cía]


    PEÑA DACOSTA, VÍCTOR

    PEÑALVER, PATRICIO

    PEÑAS, ESTHER

    PÉREZ CAÑAMARES, ANA
    [Querida hija imperfecta]


    PÉREZ CAÑAMARES, ANA
    [Las sumas y los restos]


    PÉREZ LEAL, AGUSTÍN

    PÉREZ MONTALBÁN, ISABEL

    PERONA, JESÚS

    PICÓN, EMILIO

    PRADA, JUAN MANUEL DE

    PRUDENCIO, JESÚS

    PUJANTE, BASILIO

    PUJANTE, MANUEL

    QUIJANO SÁNCHEZ, EDUARDO

    RÍOS, BRENDA

    RIVAS GONZÁLEZ, MANUEL

    ROBLES, SALVA

    RODRÍGUEZ, ALFREDO

    RODRÍGUEZ, ALFREDO
    [Urre Aroa]


    RODRÍGUEZ, ALFREDO
    [Días del indomable]


    RODRÍGUEZ, HILARIO J.

    RODRÍGUEZ JIMÉNEZ, ANTONIO

    RODRÍGUEZ PAPPE, SOLANGE

    ROMERO MORA, J.D.

    ROMERO MORA, J.D.
    [En el desvarío]


    ROSADO, JUAN JOSÉ

    ROSSELL, MARINA

    ROVALHER, DANIEL

    RUDEL, JAUFRÉ

    RUIZ, MIGUEL ÁNGEL

    RUIZ GUERRERO, Mª CARMEN

    SALSE BATÁN, ALEJANDRO

    SÁNCHEZ, GINÉS

    SÁNCHEZ, GINÉS [2096]

    SÁNCHEZ, GINÉS
    [El borde cortante]


    SÁNCHEZ, GINÉS [Mujeres en la oscuridad]

    SÁNCHEZ AGUILAR, DIEGO

    SÁNCHEZ AGUILAR, DIEGO
    [El nudo]


    SÁNCHEZ AGUILAR, DIEGO
    [Factbook]


    SÁNCHEZ AGUILAR, DIEGO
    [La cadena del frío]


    SÁNCHEZ AGUILAR, DIEGO
    [Los que escuchan]


    SÁNCHEZ GÓMEZ, MARISOL

    SÁNCHEZ MARTÍN, LUIS

    SÁNCHEZ MARTÍN, LUIS
    [Pastillas debajo de la lengua]


    SÁNCHEZ MENÉNDEZ, JAVIER

    SÁNCHEZ ROBLES, MIGUEL

    SÁNCHIZ, ANTONI

    SANTOS, ABEL

    SCHWEBLIN, SUSANA

    SEÑOR, RUBÉN

    SERRANO, PABLO

    SORIANO, ADA

    SUANE, SAÚL

    TRIGUEROS, SARA J.

    ÚBEDA, ANABEL

    URÍA, JUAN MANUEL

    VAL, FERNANDO DEL

    VALDÉS, ANDREA

    VALERO, MANUEL

    VALLÈS, TINA

    VARAS, VALENTINA

    VEGA, MIGUEL

    VERA FIGUEROA, ALBA

    VICENTE, TERESA

    VICENTE CONESA, FRANCISCO

    VILA-MATAS, ENRIQUE

    VINUEZA, HUMBERTO
    WÄSTBERG, PER
    YUSTE, MARÍA
    ZAIDENWERG, EZEQUIEL
    ZERÓN HUGHET, JOSÉ LUIS
    ZÚÑIGA, MARTÍN

    Hemeroteca

    ARIAS, ANTONIO
    [LAGARTIJA NICK]

    AUTE, LUIS EDUARDO
    CERVERA SALINAS, VICENTE
    CUADRADO,  JESÚS
    GARCÍA, CONCHA
    GINÉS, ANTONIO LUIS
    HERNÁNDEZ MOLINA, TOMÁS
    LEGAZ, ALFONSO
    OLIVER LABRA, CARILDA
    PICÓ, SOL
    PIGLIA, RICARDO
    VENUE CONNECTION
    VILLENA, LUIS ANTONIO (DE)

    Archivos

    Junio 2025
    Mayo 2025
    Marzo 2025
    Febrero 2025
    Enero 2025
    Diciembre 2024
    Noviembre 2024
    Septiembre 2024
    Julio 2024
    Junio 2024
    Mayo 2024
    Marzo 2024
    Febrero 2024
    Enero 2024
    Diciembre 2023
    Noviembre 2023
    Octubre 2023
    Septiembre 2023
    Agosto 2023
    Julio 2023
    Mayo 2023
    Marzo 2023
    Febrero 2023
    Enero 2023
    Diciembre 2022
    Noviembre 2022
    Octubre 2022
    Agosto 2022
    Julio 2022
    Junio 2022
    Mayo 2022
    Abril 2022
    Marzo 2022
    Febrero 2022
    Enero 2022
    Diciembre 2021
    Octubre 2021
    Septiembre 2021
    Julio 2021
    Junio 2021
    Abril 2021
    Marzo 2021
    Enero 2021
    Diciembre 2020
    Noviembre 2020
    Octubre 2020
    Septiembre 2020
    Agosto 2020
    Julio 2020
    Junio 2020
    Mayo 2020
    Abril 2020
    Marzo 2020
    Febrero 2020
    Enero 2020
    Diciembre 2019
    Noviembre 2019
    Septiembre 2019
    Agosto 2019
    Julio 2019
    Junio 2019
    Mayo 2019
    Abril 2019
    Febrero 2019
    Enero 2019
    Diciembre 2018
    Noviembre 2018
    Octubre 2018
    Septiembre 2018
    Agosto 2018
    Julio 2018
    Junio 2018
    Mayo 2018
    Abril 2018
    Marzo 2018
    Febrero 2018
    Enero 2018
    Diciembre 2017
    Septiembre 2017
    Agosto 2017
    Julio 2017
    Junio 2017
    Mayo 2017
    Abril 2017
    Marzo 2017
    Febrero 2017
    Enero 2017
    Diciembre 2016
    Noviembre 2016
    Octubre 2016
    Septiembre 2016
    Agosto 2016
    Julio 2016
    Mayo 2016
    Marzo 2016
    Enero 2016
    Noviembre 2015
    Octubre 2015
    Julio 2015
    Mayo 2015
    Abril 2015
    Marzo 2015
    Febrero 2015
    Enero 2015
    Septiembre 2014
    Julio 2014
    Junio 2014
    Mayo 2014
    Abril 2014
    Febrero 2014

    Categorías

    Todo
    3spada
    Abel Santos
    Ada Soriano
    Adrian Bernal
    Adriana Manuela
    Agustin Perez Leal
    Alba Vera Figueroa
    Alberto Acerete
    Alberto Caride
    Alberto Chessa
    Alberto Cisnero
    Alberto Guerra Naranjo
    Alberto Martinez Marquez
    Alberto Olmos
    Alejandro Botana Martinez
    Alejandro Fernandez Bruña
    Alejandro Hermosilla Sanchez
    Alejandro Lopez Pomares
    Alex Chico
    Aleyda Quevedo Rojas
    Alfonso Garcia Villalba
    Alfonso Garcia-villalba
    Alfonso Legaz
    Alfredo Rodriguez
    Alicia Louzao
    Almenara
    Alvaro Bellido
    Alvaro Cortina
    Amanda Sorokin
    Amanda Zamaro Del Baño
    Amanda Zamora Del Baño
    Amanda Zamora Del Baño
    Amor Costa
    Ana Alcubierre
    Ana Blandiana
    Ana Cerezuela
    Ana Claudia Diaz
    Ana Fuster
    Ana Geranios
    Ana Martinez Castillo
    Ana Perez Cañamares
    Anabel Ubeda
    Anabel Ubeda Bernal
    Anatomia De Una Sombra
    Andrea Chaile
    Andrea Lopez Kosak
    Andrea Valdes
    Andres Garcia Cerdan
    Andres Nortes
    Andres Seoane
    Angel Cerviño
    Angel Gracia
    Angel Manuel Gomez Espada
    Ani Galvan
    Anibal Garcia
    Anja Marquardt
    Anti-folk
    Antoni Sanchiz
    Antonio Aguilar Rodriguez
    Antonio Alfaro Orenes
    Antonio Arias
    Antonio Gomez
    Antonio Gomez Ribelles
    Antonio Guerrero
    Antonio Lafarque
    Antonio Luis Gines
    Antonio Luis Ginés
    Antonio Marin Albalate
    Antonio Moreno
    Antonio Orejudo
    Antonio Parra Sanz
    Antonio Rodriguez Jimenez
    Antonov
    Ary Malaver
    Assia Dagher
    Autobiografia
    Azahara Palomeque
    Baile De Mascaras
    Balduque
    Basilio Pujante
    Bea Miralles
    Bibiana Collado
    Blanca Mart
    Bogumila Wyrzykowska
    Brenda Rios
    Brocal Y Voraz
    Bruno Galindo
    Candaya
    Cantar Que
    Cara B
    Carilda Oliver Labra
    Carlos Frubeck Moreno
    Carlos Gass
    Carlos Marzal
    Carmelo Chillida
    Carmen Membrive Gonzalez
    Carmen Rebollo
    Carmen Ruiz Guerrero
    Cars And Films
    Celine
    Chaman
    Chaman Ediciones
    Chus Castejon
    Clara Herrero Celdran
    Concepcion Monteverde Sanchez
    Concha Garcia
    Construyendo Babel
    Cristina Elena Pardo
    Cristina Morano
    Cristobal Dominguez Duran
    Cuaderno De Bitacora
    Cuando El Tiempo
    Daiana Henderson
    Damian Sarro
    Dan Coman
    Daniel Grozo
    Daniel Rovalher
    David Acebes
    David Ferraz Gutierrez
    David Gonzalez Lago
    David Lopez Sandoval
    Del Tiempo Y Su Miseria
    Dentro
    Desirée Delgado
    Diana Guemarez Cruz
    Diego L Garcia
    Diego Roel
    Diego Sanchez Aguilar
    Dolan Mor
    Domingo Llor
    Dominique A
    Dominique Ané
    Eduardo Moga
    Eduardo Quijano Sanchez
    El Borde Cortante
    El Coloquio De Las Perras
    El Coloquio De Los Perros
    El Manifiesto De La Ofensa
    Elena Borras
    Elena Pedrosa
    Elena Roman
    Elena Trinidad
    Elena Trinidad Gomez
    Eloy Moreno
    Emilio Picon
    En El Desvario
    Enrique Cabezon
    Enrique Falco
    Entre Amigos
    Ernesto Garcia Lopez
    Ernesto Hernandez Busto
    Esdrujula
    Este Es El Nucleo
    Esteban Beltran Verdes
    Estefania Cabello
    Ester Rabasco Macias
    Esther Garboni
    Esther Peñas
    Estrella Morente
    Eva Gallud
    Ezequiel Zaidenwerg
    Factbook
    Fernado Salazar
    Fernando Del Val
    Fernando Salazar Torres
    Fernando Tinajero
    Flora Celdran
    Flora Lobato
    Floren Celdran
    Florentina Cedran
    Florentina Celdran
    Forcola
    Fotografia
    Francisco Jose Sanchez Montalban
    Francisco Layna
    Francisco Layna Ranz
    Francisco Vicente Conesa
    Fue Voraz
    Fulgencio Antonio Lopez Aguera
    Gala Hernandez
    Gema Albornoz
    Gines Cruz
    Gines Reche
    Gines Sanchez
    Gonzalo Salesky
    Guillermo Busutil
    Hector Garcia Quintana
    Hector Tarancon Royo
    Hemeroteca
    Henrik Nordbrandt
    Hg Quintana
    Hilario J. Rodriguez
    Hiram Barrios
    Humberto Vinueza
    Iconoclasta
    Idoia Arbillaga
    Ignacio Borgoños
    Ignacio Borgoños
    Ignacio Borgoños
    Ignacio Garcia Fornet
    Ines Belmonte
    Ines Belmonte Amoros
    Inma Luna
    Inma Miralles
    Ino Canovas Montiel
    Isabel Baena Rodriguez
    Isabel Garcia Mellado
    Isabel Gimenez Caro
    Isabel Perez Montalban
    Ismael Cabezas
    Jam Albarracin
    Jaufre Rudel
    Javier Celorrio
    Javier Claure
    Javier Del Aguila
    Javier Morales
    Javier Moreno
    Javier Sanchez Menendez
    Javier Tortosa
    Jesus Boluda Del Toro
    Jesus Cuadrado
    Jesus G Maestro
    Jesus Gutierrez Lucas
    Jesus Montoya Juarez
    Jesus Ortiz Pejon
    Jesus Perona
    Jesus Prudencio
    Jesus Zeron
    Jeymer Gamboa
    Joaquin Baños
    Jorge Aroita
    Jose Antonio Saez
    Jose Bocanegra
    Jose Daniel Espejo
    Jose Joaquin Bermudez Olivares
    Jose Juan Morcillo
    Jose Luis Lopez Bretones
    Jose Luis Zenon Huguet
    Jose Luis Zeron Huguet
    Jose Manuel Diez
    Jose Manuel Lara Alberca
    Jose Maria Mico
    Jose Oscar Lopez
    Juan Antonio Lopez Ribera
    Juan Carlos Vasquez
    Juan De Beatriz
    Juan De Dios Garcia
    Juan Jose Rosado
    Juan Lozano Felices
    Juan Manuel De Prada
    Juan Manuel Uria
    Juan Pardo Vidal
    Juan Yufra
    Julio Cesar Galan
    Julio Hernandez
    Julio Monteverde
    Karlos Linazasoro
    Karmelo C Iribarren
    La Condena De La Memoria
    La Hijamadre
    La Marea Negra
    La Trama De Los Dias
    Lagartija Nick
    Las Sumas Y Los Restos
    Leonardo Cano
    Lidia Rocha
    Lo Que Esconde El Manglar
    Lo Que Se Hunde
    Lola Lopez Mondejar
    Lola Nieto
    Lola Schutz
    Los Conjurados
    Los Que Escuchan
    Los Sueños Aereos
    Lucas Margarit
    Lucho Aguilar
    Lucia Sanchez
    Lugar
    Luis Antonio De Villena
    Luis Armenta Malpica
    Luis Gonzalo Portugal
    Luis Machuca
    Luis Miguel Alonso Najera
    Luis Sanchez Martin
    Luisa Pastor
    Lujo Berner
    Luna Miguel
    Macarena Gomez
    Maite Marti Vallejo
    Malpaso
    Manam
    Mandarache
    Manuel Acosta
    Manuel Angel Gomez Angulo
    Manuel Gonzalez Mairena
    Manuel Jesus Soriano Pinzon
    Manuel Moya
    Manuel Neto Dos Santos
    Manuel Pujante
    Manuel Rivas Gonzalez
    Manuel Valero
    Manuela Partearroyo
    Mar De Las Agatas
    Marc Hanrez
    Maria Jose Villarroya
    Maria Marin
    Maria Martinez Azorin
    Maria Yuste
    Marina Alcolea
    Mario Marin
    Mario Quintana
    Marisa Lopez Soria
    Marisol Sanchez Gomez
    Markel Hernandez Perez
    Marta Castaño
    Marta Gomez De La Vega
    Martin Zuñiga
    Mercedes Gomez Blesa
    Miguel Angel Hernandez
    Miguel Angel Muñoz
    Miguel Angel Ruiz
    Miguel De Juan
    Miguel Vega
    Miguel-angel-ortiz-albero
    Miguel-angel-velasco
    Monfrague
    Montse-fernandez-crespo
    Morir Es Un Color
    Musica
    Nadia-contreras
    Nares Montero
    Natalia Carbajosa
    Natxo Vidal
    Nihiloma
    No Fall
    No Siga Ese Pajaro
    Null Island
    Nuria Mendoza
    Nurit Kasztelan
    Oscar Navarro
    Osuna
    Otra Vez La Poesia
    Pablo Lopez
    Pablo Lopez Pellicer
    Pablo Sabiote Martinez
    Pablo Serrano
    Paco Gomez Espada
    Paco Paños
    Paco Paños Garcia
    Paco Paños Garcia
    Palabra
    Palabra Lugar
    Papeles Del Naufrago
    Patricio Peñalver
    Paula Barba Del Pozo
    Pedro Alcarria Viera
    Pedro M. Domene
    Pencho Lopez
    Pencho Lopez Agüera
    Per Wastberg
    Pilar Adon
    Pilar Blanco Diaz
    Poco Lazaro
    Pre-textos
    Pues Con Solo Ver Tu Pequeña Capa Estoy Contenta
    Rafa Cervera
    Rafael Calvache
    Rafael Camarasa
    Rafael Lopez Vilas
    Ramiro Gairín
    Ramon Bascuñana
    Raquel Lanseros
    Raul Quinto
    Remake
    Revista Apostasia
    Reyes Pascual
    Ricardo Piglia
    Ril Editores
    Rima Elkouri
    Roberto Alba
    Roberto Loya
    Rocio Pintado Navarro
    Rodrigo Garcia Marina
    Rodrigo Garrido Paniagua
    Romero Mora
    Ron Lala
    Rosa De Diego
    Ruben Abella
    Ruben Bleda
    Ruben Martin
    Ruben Señor
    Rutina Del Asesino
    Salome Ballestero
    Salva Robles
    Salvador Galan Moreu
    Salvador Garcia Jimenez
    Samanta Schweblin
    Samuel Jaro Miñarro
    Sara J Trigueros
    Sara Mesa
    Saray Fernandez
    Saul Suane
    Sebastian Mondejar
    Sebastian Moreno
    Segundo
    Ser Lugar
    Sergio Chejfec
    Sergio Del Molino
    Sihara Nuño
    Sol Pico
    Solange Rodriguez Pappe
    Susana Martin Gijon
    Susana Montoya Del Alamo
    Teresa Dovelpage
    Teresa Vicente
    Tina Valles
    Tomas Hernandez Molina
    Tomber Sous Le Charme
    Trifon Abad
    Vaciad La Tierra
    Vacionismo
    Valentina Varas
    Ventura Berbel
    Venue Connection
    Versatiles
    Vicente Cervera Salinas
    Victor Almeda Estrada
    Victor Peña Dacosta
    Viejas Danzas Españolas
    Vilma Isabel Dominguez
    Violeta C Rangel
    Violeta Font
    Virgilio Cara Valero
    Viridiana Carrillo
    Xanath Caraza
    Yeguas Exhaustas
    Yo Estoy En La Imagen
    Yuleisy Cruz Lezcano

    Canal RSS

Con tecnología de Crea tu propio sitio web con las plantillas personalizables.