ARTÍCULOS
TOCAMOS TODOS LOS PALOS, INCLUIDOS LOS DEL FLAMENCO
por SAID VLADIMIR RAMÍREZ TÉLLEZ A finales de los años 30, en la obra de Pareja Diezcanseco —ya consagrado como una de las voces más prometedoras de la nueva narrativa ecuatoriana— comienzan a gestarse nuevas preocupaciones estéticas, nuevos caminos narrativos nunca antes explorados. Es de esta forma que el extenso abanico de recursos creativos se expande (1), llevando al escritor ecuatoriano a concebir una nueva etapa en su escritura: la interiorización de los personajes. Se entra en la psicología del hombre y se buscan en ella las razones y sin razones por las cuales las actitudes y posturas humanas adquieren pronunciamientos aparentemente inexplicables. El hombre hacia adentro y la implementación del humor como recurso para caracterizar a los personajes y las situaciones. De pronto ya no importa el entorno, sino lo que sucede dentro de la psique de las figuras humanas. La primera novela de esta nueva tendencia es Hechos y hazañas de Don Balón de Baba y de su amigo Inocencio Cruz (1939) obra de tesitura fársica que pretende cambiar el sentido de la literatura ecuatoriana, que por ese entonces carece de humor y de amenidad, siendo la única explicación posible al respecto, el difícil panorama nacional, la hosquedad que caracteriza la lucha diaria por la subsistencia, los rezagos coloniales y la dureza de la política dominante. Esta novela ha sido saludada por la crítica como la «primera novela esperpéntica del país» (2). La obra surge del anhelo de su autor por descubrir un “Don Quijote del Ecuador”. No es la primera vez que un autor ecuatoriano ha tratado de implementar el legado cervantino a la obra de ficción. Juan Montalvo hizo lo propio en su Capítulos que se le olvidaron a Cervantes (1895). Pero nadie ha tenido éxito igual al de Pareja. Don Balón, natural del pueblecito de Baba, tiene una visión platónica de sí mismo. Vive casi solo en Guayaquil, en compañía de una criada, llamada Micaela. Pasa la mayor parte de su tiempo encerrado en su cuarto o en el balcón contemplando a su Dulcinea, la joven Cándida. Es tan bizarro en sus acciones que su ama de llaves cree «está loco de remate o es verdad que le ha vendido el alma al diablo» (3). A continuación, Baba llama a Inocente Cruz, antiguo compañero, que va a representar a Sancho Panza; la afición por los refranes, su estrato social humilde y la incapacidad de entender las ideas de Balón. El personaje de Pareja sueña, como Don Quijote, en un mundo irreal y perfecto, mientras choca inevitablemente contra el mundo y su realidad generalizada (complejo de dualidad cervantino). El escritor guayaquileño desarrolla el tejido argumental conforme al de Cervantes. En ese sentido, Don Balón, carga contra los molinos de viento de la realidad, resultando siempre en el fracaso y en el ridículo, mientras tanto que su escudero, Don Inocencio, expresa la cordura, los cimientos del buen juicio, aunque, a raíz de la convivencia con su señor se deja confundir por éste, fruto de su credulidad y simplicidad, como Sancho en la obra icono de la lengua castellana. Muchos de los capítulos parecen sacados de Don Quijote, desde el título al contenido: ‘Donde continúa el misterio de la puerta cerrada y se presenta la niña Cándida’ (Capítulo III); ‘Donde se cuenta la aventura de la serrana y se sabe de la purga inevitable’ (Capítulo VIII); ‘Que trata del famoso discurso que sobre la edad futura pronuncia Don Balón, y de las no menos famosas máximas de Don Inocente’ (Capítulo X); etc. Hay humor en la novela, humor de frase y de situación, humor que frisa lo ridículo y lo grotesco. En el episodio de los espíritus, por ejemplo, describe una casa misteriosa repleta de sonidos extraños y fantasmales que al final resultan orquestados por Micaela, la criada. Cada vez que Don Balón se lanza a la aventura, en nombre del ideal humanístico o revolucionario, inevitablemente termina fustigado y en vergüenza. En su mundo desfilan personajes picarescos y falsarios: La dama del Antifaz, el Caballero Enlutado, etc, y hasta existe un momento en que el moderno caballero andante del Ecuador, orgulloso de su título de «amparo de viudas y de huérfanos, de débiles y de mujeres» (4), se esfuerza por salvar a una criada de Cándida, de las injusticias de su padre imaginario. Nuevamente pierde, como su ideal, Don Quijote. En lugar de molinos, son árboles quienes lo vencen en una gran batalla. Son muchas, y variadas las resonancias con la obra de Cervantes, transpuestas a la obra de Pareja a efectos de intensificar el clima de ironía e incongruencia. Pero Don Balón, si bien vive en el mundo de sus quimeras revolucionarias, es profundamente tropical y ecuatoriano; sabemos que se trata del Guayaquil de la época —el auge de las exportaciones del cacao, el surgimiento de una nueva clase obrera, la inminente llegada de una crisis económica—, pero es al mismo tiempo un Guayaquil irreal, hecho para servir de retablillo en una obra del absurdo, el tiempo mismo de la trama: dos días apenas plagados de muchos acontecimientos y pesadillas, los personajes que se mueven como muñecos trágicos, obedeciendo una caracterización ya premeditada, sucesos extraños y esa constante atmósfera de lo engañoso, de lo fantástico, de lo incomprensible. Novela tragicómica, caricatura de un personaje esperpéntico que proclama a cada paso «su amor por lo extraordinario, su afición por el viaje hacia las tierras de íncubos y súcubos, por la asistencia a las noches de walpuris y, a ratos, su amor por viajar hacia el país de las treinta y seis mil voluntades» (5). Novela que pasó desapercibida en su tiempo y aun hoy continúa injustamente relegada en el olvido, tal vez por la adustez de la narrativa ecuatoriana, que no fue capaz de aceptar, en ese momento, su naturaleza esperpéntica. Pero si hemos esperado 400 años para que los lectores lean Don Quijote, es casi con seguridad que este Don Balón de Baba encontrará el destacadísimo lugar que sin duda merece en la narrativa latinoamericana. ————--
(1) Al igual que Pareja Diezcanseco, el resto de los componentes de la generación del 30 comienzan a explorar otros senderos narrativos en la década de los cuarenta: Aguilera Malta publica La isla virgen (1941), segunda entrega de su saga mágica, Humberto Salvador retoma su línea del psicoanálisis y la implementación del monologo interior en obras como, La novela interrumpida (1942), Prometeo (1943), Universidad Central (1944) y La fuente clara (1946), Jorge Icaza transporta la trágica situación del indio explotado a la ciudad, esta vez incorporando a su mundo novelado a los cholos y otros mestizos como agentes de represión en las novelas Media vida deslumbrados (1942), Huairapamushcas (1948), finalmente Enrique Gil Gilbert y Joaquín Gallegos Lara crean novelas con estructuras complejas, como son Nuestro pan (1942) y Las cruces sobre el agua (1946). (2) Donoso Pareja, Miguel. “Una visión familiar de Alfredo Pareja Diezcanseco”. Kipus revista andina, Ago; ene. 2008: 295-302. (3) Pareja Diezcanseco, Alfredo. Don Balón de Baba. Quito: Casa de la cultura ecuatoriana, 1960. (4) Ibíd. (5) Carrión, Benjamín. Narrativa latinoamericana. Quito: Centro cultural Benjamín Carrión, 2005.
5 Comentarios
Nicolas
14/12/2018 06:47:03 am
Hola muy buenos días, me parece interesante la obra literaria de Pareja Diezcanseco, "Don Balón de Baba" donde la puedo adquirir?
Responder
Said Vladimir
5/1/2019 03:26:57 pm
Hola amigo Nicolas , la novela Don Bálon de Baba solo la puedes conseguir en Iberlibro o en Todocolección ya que es un libro muy antiguo y con pocas ediciones, por otra parte si estas interesado en conocer el resto de la obra de Pareja, puedes encontrar fácilmente las novelas El muelle, La Beldaca, Baldomera, y Las tres ratas en la editorial Libresa distribuida por el Fondo de Cultura Económica, recibe un abrazo
Responder
Oferta de Prestamo Urgente
27/8/2022 05:56:29 am
Buenos días señor / señora,
Responder
Oferta de Prestamo Urgente
27/8/2022 05:59:48 am
Buenos días señor / señora,
Responder
Oferta de Prestamo Urgente
27/8/2022 06:02:31 am
Buenos días señor / señora,
Responder
Deja una respuesta. |
ARTÍCULOS
El Coloquio de los Perros. ESTARÉ BESANDO TU CRÁNEO. "PRINCIPIO DE GRAVEDAD" DE VICENTE VELASCO
LOS AÑOS DE FORMACIÓN DE JACK KEROUAC ALGUNAS FUENTES FILOSÓFICAS EN LA NARRATIVA DE JORGE LUIS BORGES EDWARD LIMÓNOV: EL QUIJOTE RUSO QUE SINTIÓ LA LLAMADA A LA ACCIÓN EXILIO Y CULTURA EN ESPAÑA VIGENCIA DE LA RETÓRICA: RALPH WALDO EMERSON, MIGUEL DE UNAMUNO Y EL AYATOLÁ JOMEINI LA VISIÓN DE RUBÉN DARÍO SOBRE ESPAÑA EN SU LIBRO "ESPAÑA CONTEMPORÁNEA" PUNTO DE NO RETORNO JOSÉ MANUEL CABALLERO BONALD: ENTRE LA NOCHE Y LA CREACIÓN EL HIELO QUE MECE LA CUNA NO FUTURE MUERTE EN VENECIA: DE LA NOVELA AL CINE GUILLERMO CARNERO: DEL CULTURALISMO A LA POESÍA ESENCIAL ARCHIPIÉLAGOS DE SOLEDAD DENTRO DE LA PINTURA JUAN GOYTISOLO, NUEVO PREMIO CERVANTES, LA LUCIDEZ DE UN INTELECTUAL CONTEMPORÁNEO LA INFLUENCIA DE LUIS CERNUDA EN LA OBRA DE FRANCISCO BRINES EL LENGUAJE POÉTICO, REALIDAD Y FICCIÓN EN LA OBRA DE JAIME SILES EL ENSAYO COMO PENSAMIENTO GLOBAL EN LA OBRA DE JAVIER GOMÁ DESIERTOS PARADÓJICOS, DESIERTOS MORTÍFEROS DOS POETAS ANDALUCES Y UNA AVENTURA EXISTENCIAL "NEO-NADA", DE DOMINGO LLOR EL SOMBRÍO DOMINIO DE CÉSAR VALLEJO LAURIE LIPTON: DANZAS DE LA MUERTE EN UNA ERA DEL VACÍO MUJICA. LA SAPIENCIA DEL POETA IMITACIÓN Y VERDAD. JOHN RUSKIN LA OBRA LUMINOSA DE ÁLVARO MUTIS A TRAVÉS DE MAQROLL EL GAVIERO SIEMPRE DOSTOIEVSKI. REFLEXIONES SOBRE EL CIELO Y EL INFIERNO ANÁLISIS DEL PERSONAJE DE OFELIA EN HANMLET DE WILLIAM SHAKESPEARE EL QUIJOTE, INVECTIVA CONTRA ¿QUIÉN? ESQUINA INFERIOR DERECHA, ESCALA 1:500 BAUDELAIRE Y "LA MUERTE DE LOS POBRES" "ES EL ESPÍRITU, ESTÚPIDO" CONEXIÓN HISPANO-MEJICANA: JUAN GIL-ALBERT Y OCTAVIO PAZ LADY GAGA: PORNODIVA DEL ULTRAPOP LA BIBLIA CONTRA EL CALEFÓN. LAS IMÁGENES RELIGIOSAS EN LOS TANGOS DE ENRIQUE SANTOS DISCÉPOLO VILA-MATAS, EL INVENTOR DE JOYCE. UNA LECTURA DE "DUBLINESCA" UNA BOCANADA DE AIRE FRESCO: EL NUEVO PERIODISMO COMO LA VOZ DEL ANIMAL NOCTURNO. BREVES ANOTACIONES SOBRE LA TRAYECTORIA POÉTICA DE CRISTINA MORANO JOHN BANVILLE: LA ESTÉTICA DE UN ESCRITOR CONTEMPORÁNEO KEN KESEY: EL MESÍAS DEL MOVIMIENTO PSICODÉLICO CINCUENTA AÑOS DE UN LIBRO MÁGICO: RAYUELA, DE JULIO CORTÁZAR LA INCOMUNICACIÓN Y EL GRITO QUEVEDO REVISITADO: FICCIÓN, REALIDAD Y PERSPECTIVISMO HISTÓRICO EN "LA SATURNA" DE DOMINGO MIRAS LAS RIADAS DEL ALCANTARILLADO MÚSICA EN LA VANGUARDIA: LA ESCRITURA DE ROSA CHACEL MULTIPLICANDO SOBRE LA TABLA DE LA TRISTEZA: UNA APROX. A LA TRAYECTORIA POÉTICA DE JOSÉ ALCARAZ RUBÉN DARÍO EN LOS TANGOS DE ENRIQUE CADÍCAMO THE VELVET UNDERGROUND ODIABAN LOS PLÁTANOS "TREN FANTASMA A LA ESTRELLA DE ORIENTE" DE PAUL THEROUX: EL VIAJE COMO FORMA DE CONOCIMIENTO EL TEMA DEL VIAJE EN LA PROSA FANTÁSTICA HISPANOAMERICANA GUERRA MUNDIAL ZEUTA LA HAZAÑA DE PUBLICAR UN NOVELÓN CON SOLO 25 AÑOS JACINTO BATALLA Y VALBELLIDO, UN AUTOR DE REFERENCIA EL OJO SONDA: LA MIRADA DE TERRENCE MALICK SURF Y MÚSICA: MÚSICA SURF EL PERSONAJE METAFICCIONAL DE AUGUST STRINDBERG MARCELO BRITO: PRIMEROS PASOS HACIA EL TREMENDISMO EN LA OBRA DE CAMILO JOSÉ CELA EPIFANÍAS JOYCEANAS Y EL PROBLEMA AÑADIDO DE LA TRADUCCIÓN EL VALLE DE LAS CENIZAS RASGOS BRETCHTIANOS EN "LA TABERNA FANTÁSTICA" DE ALFONSO SASTRE AL OESTE DE LA POSGUERRA. JÓVENES EXTREMEÑOS EN EL MADRID LITERARIO DE LOS CUARENTA LORD BYRON Y LA MUERTE DE SARDANÁPALO JUAN GELMAN. UNA MIRADA CARGADA DE FUTURO FRANZ KAFKA: UN ESCRITOR DISIDENTE Hemeroteca
Archivos
Julio 2024
Categorías
Todo
|