RODRIGO OSORIO GUERRERO

LA FICCIÓN NUESTRA DE CADA DÍA

 
Una sesión de circo se iniciaba
en la constelación decimoctava
 
GERARDO DIEGO
Amor en Fábula de Equis y Zeda
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​         El 29 de marzo de 2018 falleció repentinamente Sergio B. Landrove, que fue colaborador de El coloquio de los perros. Dejó terminadas tres obras (un ensayo y dos novelas), de cuyas ediciones me estoy ocupando cotejando las distintas versiones y siguiendo las minuciosas instrucciones de su autor. El ensayo, titulado En el vientre de la matriosca (Una inmersión literaria en la ficción nuestra de cada día), es un estudio desde la perspectiva literaria de los bulos y las paparruchas en los albores del periodismo digital.
         Publicamos en primicia el inicio de esta obra, traducida al castellano por Carme Mariño, en la que Landrove bosqueja su concepción literaria de la realidad.

EN EL VIENTRE DE LA MATRIOSCA
Una inmersión literaria en la ficción de cada día

Sergio B. Landrove

           1. APERITIVO
 
           1.1. LO ACAECIDO
 
           1.1.1. Una carta a la directora
 
        El 1 de junio de 2004 el diario El Mundo publicaba en su sección “Cartas al director” la siguiente misiva:
 
     «Leo en su periódico del pasado jueves 27 de mayo la noticia sobre los problemas que un ciudadano saudí tiene para que reconozcan su segundo matrimonio. En la breve reseña un abogado explica: la poligamia atenta contra el orden público español, no pueden concebirse familias poligámicas en nuestro orden civil…
        España es un Estado laico o, al menos, presume de serlo. Como tal, no tiene problema alguno en plantearse legalizar la prostitución a pesar de ser un enorme negocio que se nutre de la esclavitud y vejación de miles de mujeres. Y también se empieza a contemplar la adopción por parejas homosexuales. Pero nunca permitirá familias de base poligámica porque “atentan contra el orden público español”, que sigue encastillado en sus más rancias tradiciones.
     ¿Qué precepto constitucional impide la poligamia si todos los cónyuges consienten libremente? ¿Acaso una costumbre ejercida con libertad y pleno respeto a los derechos de los demás puede escandalizar a alguien? El mundo está cambiando y su capital ya no es Roma. ¿Cuándo abandonaremos la tutela de la Iglesia Católica en ocasiones tan vergonzante? 

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Zoraida Ylfii
Madrid».

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          ​1.1.2. El autor de este tiento escribe una carta
 
          Unos días antes tecleé en la computadora de mi casa algunas más de las 181 palabras de la carta anterior. Abrí una cuenta de correo electrónico combinando el nombre y el apellido que había inventado para firmar la carta y la envié indicando una dirección de Madrid a la sección de cartas al director del diario El Mundo.
 
           1.2. LO FICTICIO
 
           1.2.1 Una (buena) nueva
 
           En la página 13 de la edición de 27 de mayo de 2004 de El Mundo se podía leer:
 
          «EL TRIBUNAL SUPREMO CONTRA LA POLIGAMIA
 
         El alto Tribunal deniega el reconocimiento del segundo matrimonio de un ciudadano saudí por ser contrario al orden público.
 
      MANUEL VEGA. Madrid. La sala de lo Civil del Tribunal Supremo confirma una sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Cuenca que denegaba a un ciudadano saudí el reconocimiento en España de su segundo matrimonio. 
 
         En la resolución, que se hizo pública ayer, los magistrados son claros: “la poligamia [...] repugna al orden público español, que constituye siempre un límite infranqueable a la eficacia del derecho extranjero [...]. Entendido el orden público como el conjunto de aquellos valores fundamentales e irrenunciables sobre los que se apoya nuestro entero ordenamiento jurídico, resulta incuestionable la incompatibilidad con el mismo de la poligamia; y ello sencillamente porque la poligamia presupone la desigualdad entre mujeres y hombres, así como la sumisión de aquéllas a éstos. Tan opuesta al orden público español es la poligamia, que el acto de contraer matrimonio mientras subsiste otro matrimonio anterior es delito en España”. El fiscal manifestó que el Supremo confirma la tesis defendida por el Ministerio Público de que no pueden concebirse familias poligámicas en nuestro orden civil, “en primer lugar porque supone una lesión para los derechos de la mujer, en segundo porque el matrimonio poligínico atenta contra el orden público español, entendido como un conjunto de principios e instituciones que son fundamentales en la organización de una sociedad”.

​        Todo comenzó en 1992, cuando un ciudadano saudí residente en Cuenca solicitó a un juez el reconocimiento de su segundo matrimonio simultáneo que se había celebrado meses antes en Riad. El titular del Juzgado de Primera Instancia Núm. 2 de Cuenca reconoció el vínculo, lo que dio lugar al primer matrimonio polígamo ratificado judicialmente en España. El Ministerio Fiscal recurrió aquella sentencia, primero ante la Audiencia Provincial y luego ante el Tribunal Supremo, que finalmente concluyó que en España no es posible la poligamia.
         Ahmed Mussi, representante de la Confederación de Comunidades Islámicas en España, ha manifestado su total respeto a las resoluciones de todos los órganos e instituciones españolas, de hecho “estas resoluciones son las que nos animan a trabajar para explicar nuestra concepción del mundo y lograr una mejor convivencia”».
 
          1.2.2. Zoraida Ylfii escribe una carta
 
          Zoraida ya conocía la noticia porque la Comunidad Islámica de Cuenca le había enviado una copia de la sentencia y llevaba un tiempo pensando cómo enfocar el recurso ante el Tribunal Constitucional. Sabía que la impugnación tenía pocas posibilidades de éxito, pero consideraba imprescindible conseguir la mayor publicidad posible al trato desigual que suponía no reconocer la plena eficacia jurídica a los matrimonios polígamos. El 27 de mayo, tras leer la noticia en el periódico, decidió escribir una carta al director de El Mundo. Necesitaba que se conociera su opinión.

​           2. DE TODAS LAS COSAS VISIBLES E INVISIBLES
 
           2.1. DE LA REALIDAD
 
          Necesariamente tengo que comenzar con la fórmula que todas mis prójimas me han escuchado hasta el cansancio; no sería justo con ellas si aquí no repitiera, una vez más que

​LA REALIDAD = LO ACAECIDO + LO FICTICIO

       Creo que ya lo he dejado claro en el aperitivo de este tiento. Desde la perspectiva de una lectora que no me conozca o que, pese a conocerme, no supiera que yo era el autor de la carta que publicó El Mundo, la existencia de Zoraida Ylfii es tan indudable como el hecho de que el periódico publicó, el 27 de mayo de 2004, una noticia sobre una sentencia que denegaba el reconocimiento en el Reino de España del segundo matrimonio simultáneo de un ciudadano saudí.
       Si bien los dos últimos hechos son ficticios: no existe Zoraida ni El Mundo publicó la noticia que transcribí.
      Pero ambos pasan por existentes porque en otro ejemplar de ese diario publicaron precisamente una carta firmada por Zoraida Ylfii en la que se citaba dicha noticia y la finalidad de los periódicos, todas lo sabemos, es narrar lo que pasa. ¿Quién podría pensar que la persona responsable de la sección de opinión no comprobó la existencia del artículo al que se refiere la carta? ¿Para qué solicitan el número de documento nacional de identidad de las personas que firman estas misivas si no comprueban la existencia del remitente?
      Por el simple hecho de salir en un diario (gracias al visto bueno de un medio que tiene como objetivo describir lo acaecido) las partes «inventadas» (las del apartado 1.2. del capítulo anterior) adquieren la categoría de «verdad», con lo que pasan a ocupar una posición destacada en la «realidad». 
 
             2.1.1. Asterismos
 
     Quizá la mejor imagen de lo que la realidad es, de acuerdo con mi fórmula, sean las constelaciones esos «conjunto[s] de estrellas que, mediante trazos imaginarios, forman un dibujo que evoca una figura determinada».
     Las constelaciones parten de cosas «acaecidas», concretamente de esos puntos luminosos en el cielo que llamamos estrellas. Partiendo de esa base fáctica y usando un método «ficticio» (en el que las personas conjugamos nuestro criterio estético, los referentes de cada una de las culturas en las que estamos integradas y una proximidad subjetiva —desde la perspectiva de nuestro planeta— de los astros) fuimos trazando líneas para formar figuras con las estrellas y crear otra cosa, ya real: la constelación.
      En la mayor parte de los casos los puntos de luz que integran una constelación no tienen ninguna relación entre sí o, por lo menos, no la tienen tal y como las científicas conciben hoy el universo. De hecho muchas de las estrellas ligadas por una línea imaginaria están muy lejos unas de las otras.
       En los asterismos, como en los noticiarios, la realidad (la suma de lo ficticio y lo acaecido) prevalece frente a lo que las astrónomas consideran existente.

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​RODRIGO OSORIO GUERRERO (Ponferrada, 1977) Miembro del colectivo lugrisán In Nave Civitas (A Coruña) y asesor del consejo de redacción de la revista 15/15\15. Es el albacea literario de Sergio B. Landrove (1973-2018) y el encargado de las versiones definitivas tanto en gallego como en castellano de No ventre da matriosca, de próxima edición.