EL COLOQUIO DE LOS PERROS
  • PRINCIPAL
  • CONTACTO
  • POESÍA
  • FICCIONES
  • ENTREVISTAS
  • TRADUCCIONES
  • ARTÍCULOS
  • LA BIBLIOTECA DE ALONSO QUIJANO
  • INVITADO DE LA SEMANA
    • ANTIGUOS HUÉSPEDES
  • HEMEROTECA
    • FUERA DE PLANO
    • MUSEO DE BARATARIA
  • ÍNDICE DE AUTORES
  • JOAN MARGARIT: UNO DE LOS NUESTROS
  • PRINCIPAL
  • CONTACTO
  • POESÍA
  • FICCIONES
  • ENTREVISTAS
  • TRADUCCIONES
  • ARTÍCULOS
  • LA BIBLIOTECA DE ALONSO QUIJANO
  • INVITADO DE LA SEMANA
    • ANTIGUOS HUÉSPEDES
  • HEMEROTECA
    • FUERA DE PLANO
    • MUSEO DE BARATARIA
  • ÍNDICE DE AUTORES
  • JOAN MARGARIT: UNO DE LOS NUESTROS
EL COLOQUIO DE LOS PERROS

POESÍA

NUESTRA PARTICULAR ANTOLOGÍA DE IMPERDIBLES

JUAN CALERA

6/7/2022

0 Comentarios

 
TRÍPTICO FLORENTINO

        I. Paolo Uccello (estudio sobre el Movimiento)
 
       Toda la vida
contorneando del caballo la caída para enfangarse —la herida, apertura mugiente—; matando a muecas tras abrir los yelmos; la precipitación de todo miembro entre la fiesta; las ballestas, alrededor, asaeteando el suelo y los jirones, espontáneos tallos de ese mismo suelo; el moribundo que estrena lecho a cada mirada; la danza. Por el aire, la imposibilidad de hallar un solo árbol sano. Mientras deflagra el metal en el negro, me acerco y te estoy amando.

        III. Giotto (estudio sobre la Esencia)
 
       El primero de los hombres dispuso frente a sus ojos los restos de la batalla y del tálamo. Apaciguado el temblor nocturno se alcanzaba la verdad. Que un gentil se agigantara y los muros de palacio quedaran apoyados en sus palmas; que un siervo armado solo tuviera cabida entre el azul y el dorado bajo las facciones de un simio; que una doncella se rasgara los ojos con el dolor de quien ha visitado constantemente el lecho; que un amante olvidara la palabra incandescente y se acurrucara en un rincón… Se perdió el pudor y se alcanzó la verdad. Y todavía hay quien mira agradecido al primero de los hombres y le alaba la posibilidad de sacrificio. Y el primero de los hombres ríe hacia nosotros —nosotros dos, amor, que lo contemplamos desde la galería— y sabe —como nosotros, que también reímos— que solo se sacrifica por sí mismo —como nosotros— y que no hay mayor placer sobre la tierra que la consciencia del egoísmo. Y solo así él puede amar. Como nosotros. Como yo. Amo. Permanecemos dentro.

JUAN CALERA (Madrid, España, 1979). Ha publicado algunas de sus creaciones en obras colectivas como El cielo en movimiento (Dos Bigotes, 2015) o la antología Salida de emergencia (nosomoscómodos, 2005). Fue uno de los autores recogidos por la International Poetry Review de la Universidad de Carolina del Norte dentro de su número especial «Spain’s poetry of experience (2009)». Interesado por la multidisciplinariedad, colabora con artistas de diversos ámbitos y con revistas musicales y filológicas como articulista, investigador y crítico. Es doctor en Filología Hispánica y titulado superior de Música.
         II. Botticelli (estudio sobre la Belleza)
 
      Nada de esto era necesario. Ni mentir acerca del tacto de la ortiga y propagar su blandura ni declarar acuosas y suaves las marcas que deja en la piel; ni la piel blanca de sombra verde; no era necesaria ni para celebrar el arqueo del cuello. Ni la distancia entre el cuello y el ombligo, cobijo de huérfanos. Nada de esto era necesario. Necesario era —tal vez, eso dicen— devastar templos, asolar masas. Tal vez. Pero sé que, sin falsear la ortiga, sin rastrear la piel, sin cantar la caída del cuello, sin abrazar el torso, sé que no podría devastar templos ni asolar masas. Y tú lo sabes también. Y estás aquí, en silencio, a mi lado, contemplando. Te amo porque te adentras.

         IV. Predela
 
      Entre estas calles, a la sombra de los muros que desean besarse, de la cúpula que nos atiende y de la torre que nos recuerda, sé —y solo así lo deseo— que no hay movimiento, belleza ni esencia más allá de nuestras palmas. Me acerco y te estoy amando. Te amo mientras te adentras. Te amo porque te adentras. Amo. Permanecemos dentro.
Picture
0 Comentarios

SELENE CAROLINA RAMÍREZ

26/5/2022

0 Comentarios

 
THE WALKING DEAD AROUND
 
Sucede que me canso de ser mujer.
Me canso de ser el objeto apologético de la penetración.
No un cisne de fieltro:
un cisne de papel.
Un pato en el fango
haciendo una lucha sobrenatural por nadar,
o por volar,
o por dar unos pasitos inestables en la tierra firme de cualquier lugar seco.
Soy el agua de origen y mantengo en esas aguas
la constitución primaria de todas las partículas.
Pero no puedo navegar.
En los barcos no hay capitanas.
 
Sucede que me canso de los olores que lloran a gritos.
¿Podría un olor provocar un llanto estrepitoso?
No tengo tiempo para llorar a gritos.
Los hijos del mundo lloran a gritos en todos los oídos de mujer.
Timbran cacofónicos en el conducto auditivo de mujer.
Me canso de que pareciera que sólo nosotras los escuchamos por las noches.
Y por las tardes sin sol.
Y en los días de lluvia tenue.
Los hijos del mundo son dueños del eco del llanto primigenio.
No tengo tiempo de pensar en un descanso.
Ni siquiera en uno hipotético.
Sólo no quiero ver las sonajas,
ni la protuberancia en ascendencia de artículos por corregir,
ni las manchas de vómito blanco en algunos de ellos,
o en las dunas de mis pezones agrietados.
En mi vestido favorito.
En el sillón café.
En los libros de otros hijos que lloran a gritos en todos los oídos de mujer. Siento que los escucho llorar a través de sus letras.
Y que las letras quieren dejar de ser tinta encapsulada en el papel
y regresar al árbol lejano que cae y que no es escuchado por nadie al caer.
Me canso de ser la paradoja de ese ruido silencioso.
 
Sucede que me canso de mis pies lastimados.
De sus laceraciones.
Del arco gigantesco que le formaron las zapatillas ejecutivas.
Del espolón izquierdo.
De las callosidades en los talones.
De la descalcificación de mis uñas transparentes.
Me canso del cabello seco que no puedo teñir
y que se va por el desagüe como serpiente furiosa.
Como serpiente de arena opaca.
Me canso de la sombra que ya no es mía.
También de las nuevas sombras que me persiguen
en todos los espacios que suelo habitar,
y que no me dejan dormir con su reflejo fluorescente.
Sucede que me canso de todos los espacios que habito
y que no son míos.
Porque las procuradurías, las gerencias y las instituciones
no están ocupadas por mí.
Sucede que me canso de ser mujer.
De sostener todas las historias.
De sostener las culpas y el futuro.
De salvaguardar el orden político.
El orden íntimo.
De ser la protectora encumbrada de los malos pensamientos
y de las palabras que lastiman.
Porque me canso de ser la mujer de todos los humanos.
La mujer de todas las eras.
 
Sin embargo, ¿sería delicioso
asustar a un notario con un lirio cortado
o dar muerte a una monja con un golpe de oreja?
No.
Qué cosas escriben los hijos de otras mujeres que lloran fuerte en el canal auditivo de ellas.
Asustemos al sistema con idiolectos cortados que desaparezcan de pronto.
Demos muerte al dolor en la espalda con más brazos que sostengan.
Sería bello,
ir por las calles solas,
sin dar gritos hasta morir con un cuchillo verde incrustado en la aorta.
 
Sucede que me canso de seguir siendo el cordón umbilical del cosmos,
irresuelta, cansadísima, tiritando de sueños,
siendo absorbida y sin tiempo de pensar,
dando de comer cada día.
No quiero para el mundo tantas desgracias.
Puedo seguir siendo raíz y seré,
infaliblemente,
tumba.
Ya he pagado por mis gastos funerarios.
 
Sucede que me canso
de ser el transporte solitario que no puedo tomar por miedo a desaparecer.
La bodega de todas las muertas que me anteceden.
Las que no regresaron a casa por subir a ese transporte solitario.
A las que les pasan las grúas sobre los huesos.
Las de las tripas en el pavimento.
Las que gritaron que NO en los oídos de ellos
que lloran a gritos fuertes en el canal auditivo de todas las mujeres,
pero que son incapaces de escucharlas a ellas.
Soy la de los tres hijos de su propio padre.
La de la barriga grande por los siglos de los siglos.
 
Me canso de que todos los días ardan como el petróleo,
como sangre quemada.
Y en la cárcel no hay culpables.
Y sí, eso sí, también llego con cara de cárcel,
con cara de las filias que me depositan por todo el cuerpo.
Con cara de violación incestuosa,
con cara de salario mínimo,
con cara de hora/semana/mes ganando menos que ellos.
Con cara de medicamentos genéricos.
Y aúllo todos mis recorridos como la huella fangosa de aquella rueda herida,
y es la noche la que da pasos de sangre caliente hacia mí.
Regularmente es la noche la del miedo.
Pero a veces también se escuchan las ráfagas de fuego a la mitad del día.
A veces también desparecemos a plena luz.
Desaparecemos de las escuelas,
de los parques,
del camino que es como nuestra huella dactilar.
Desaparecemos de todos los mapas...
Son las madres las que buscan nuestros huesos
en el papel arrugado y amarillo de los mapas más antiguos.
Son ellas las de las palas pesadas y los zapatos cansados.
Las de las garras enterradas.
Las del sudor y las del llanto fuerte
que se oye en los canales auditivos de todas las madres.
Y se empujan entre ellas,
como ayudándose a avanzar
a hospitales donde los huesos salen por la ventana,
y a los rincones escondidos,
montículos de cadáveres,
de donde salen los esqueletos del matorral ocre.
 
Sucede que me canso del azufre que no es de los pájaros.
Los intestinos quisieran seguir enrollados en el cuerpo.
La casa se ama.
Las dentaduras fueron arrancadas de la boca
para evitar el reconocimiento.
Aquí no hay cafeteras
y el único café es el del suelo donde subyacen los cuerpos sin dientes.
Los espejos quedaron solos en las casas solas,
y quienes debieron de haber llorado de vergüenza y espanto no son ellos.
Los paraguas son parasoles y el agua cae de los ojos.
El veneno está en todas partes.
Los ombligos como lazo inescrutable de la concepción.
 
Sucede que me canso de jamás poder pasear con calma.
Los ojos: lámparas para aluzar toda la oscuridad del planeta.
Los zapatos de nosotras en los callejones y en la orilla de la carretera.
Cruzo por los lugares que no me pertenecen.
Por casas que esperan por sus dueñas.
Y de los alambres no cuelga la ropa:
colgamos nosotras.
Picture
Picture
Picture
Picture
Picture
Picture

Picture
Selene Carolina Ramírez © Edith Cota
SELENE CAROLINA RAMÍREZ (Hermosillo, México, 1986). Es licenciada en Literaturas Hispánicas, maestra en Literatura Hispanoamericana y doctora en Humanidades por la Universidad de Sonora; coordinadora de los diplomados Problemas actuales de la filosofía y Filosofía, literatura y ciencia en la UNISON; correctora de estilo en Agencia Narrativas y Adx; tallerista de escritura creativa en CERESOS e ITAMAS, y autora de los libros De cuando ellos se narraron (ISC, 2016) y Love is love o de cómo ato las cintas (Nitro/Press, 2019). Fue presidenta del Colegio Sonorense de Académicos de la Lengua y la Literatura (2018-2020) y becaria de CONACyT, del FECAS y del FONCA en diferentes periodos (2011-2020).
Su línea de trabajo son los estudios literarios con perspectiva de género.
0 Comentarios

JUAN FERNANDO AGUILAR CÁRDENAS

21/5/2022

2 Comentarios

 
EL ÁRBOL RESUCITADO
 
En la tarde de la infancia te has sentado a mirar
las hojas del árbol muerto,
el verde, amarilleado de sol y de viento,
que visten a la tierra y a la piedra.
 
Es el árbol del estío y del recuerdo, no lo equivoques.
Aquel que muere cada tanto,
el que conoce tu voz
y toda la ropa que has dejado.
Es la madera de otros días.
Es la hierba de siempre.
 
Como hace tanto, te arrodillas a su sombra
y tu piel besa la piel del árbol,
derramada como un río
para cubrirte la desnudez de las piernas,
heridas de años y nostalgias.
 
El árbol ha muerto para que tú vivas,
para que el asfalto y las tumbas vuelven a ser hierba y flores.
 
Acaricias las hojas caídas
portan el aroma de la quietud de marzo
las lluvias de abril
el viento de agosto y el fuego de diciembre.
 
A su sombra vuelves a jugar
con tus manos y los pétalos,
con la tierra y los guijarros.
Sientes la muerte del árbol, pero no lo miras.
Sientes su cuerpo hecho de luces y sombras
pero no levantas el rostro.
 
El árbol resucitará y tendrás que irte,
pues, ya lo sabes, ha muerto para que tú vivas.
 
Una voz vieja, hecha de arcilla y arroz, te llama desde la casa.
¿Recuerdas tu casa?
El eco anida en tu pecho,
cincela una ventana
para que entren las hojas del árbol
como si quisieran sanarlo de tantas veces
que te han visto partir.
 
Miras la casa,
la llenas de sol.
La vieja de arcilla y arroz señala el árbol.
Es la vieja amada que no te olvida.
Alzas por fin la mirada.
El árbol renace
tallo a tallo, reverdece
y el viento se levanta siempre en agosto.
 
El árbol abre un camino, las raíces te acorazan las entrañas.
Debes irte, no demores la muerte
ni el renacer del futuro.
 
La voz te despide y te perdona.
La vieja entra en la casa anegada en sol,
te bendice con el Nombre que olvidaste.
Te pones de pie, las hojas son musgo en tus rodillas,
humedad de sangre, de heridas felices jaspeadas de barro y sal.
Así partes, te vas,
el viejo jardín queda atrás.
 
Te abrazas al árbol resucitado, a su cuerpo de memorias,
cubres su corteza con el verano,
con el viento amarillo de las tardes.
Te vas perfumado de flores y hierba
hueles a tiempo y a tierra.
 
No lo olvides.
El árbol que cada tanto muere
estará esperando
hasta que tu piel se seque y te vuelvas madera,
hasta que tu sangre sea savia
y ya no quede nada que perdonarte












Picture
JUAN FERNANDO AGUILAR CÁRDENAS (Cali, Colombia, 1991). Desde niño supo que su destino estaría ligado a la literatura. Disfrutó siempre del olor de los libros viejos y del aroma de la tinta al deslizarse sobre el papel mientras se forjaba en la biblioteca de sus padres, entre los universos, peripecias y angustias que ofrece siempre la lectura. Decidió volverse escritor a los diez años, cuando leyó El Conde de Montecristo; no sabría cómo serlo sino hasta los dieciocho, mientras estudiaba psicoanálisis en la universidad. A los diecinueve leyó a Borges, después a Faulkner y a Mishima; comprendió que jamás desearía nada distinto. Ha escrito cuentos, poesías y novelas. Al sol de hoy escribe con el inapelable anhelo de vivir de la literatura. Ha publicado sus relatos en diversas revistas de Colombia, Venezuela y España.

2 Comentarios

SEBASTIÁN NÚÑEZ TORRES

30/3/2022

1 Comentario

 
ESPEJISMOS
 
Si buscas la verdad renuncia a estas palabras,
pero abraza en cambio su ilusión
el estigma blanco de su niebla
su dulce engaño
su germen de horas delirantes
su reflejo en el ventanal nocturno de las ciénagas.
 
Luz de este día, despojo de tinieblas,
sombras remitiendo agujas de lluvia
bajo el cielo de hombros abatidos.
 
No me esperes más en tu jardín
de besos ficticios espejeando
en los reversos que compiten
con el pájaro de las horas boreales
y las verdades que se quiebran
en el precipicio de las máscaras.
 
Antes que el tiempo reseque las alas
temo que los ángeles se desbaraten
si ella vuelve a soñar con la nieve
o espigas germinando para enhebrar
el crujido de las piedras despeñadas.
 
Pero hay una perseverancia oscura de raíces
disputando el despojo de las ruinas,
una pestaña desatando huracanes
de ramas rotas por el sendero de tu espalda
petrificada bajo el amor ausente de los grillos.
 
Apareces como el final de los parques
donde la ciudad vuelve al acecho
para aceptar que nada te pertenece
que todo es mentira bajo la letra
que abundas en el margen
en los distritos perdidos
que pasaron por alto los cartógrafos.
 
¿Cómo igualar siquiera el temblor de la telaraña
tras la lluvia en los cipreses del origen?
 
Tal vez la onda ya remota de la serpiente
deslizándose en el agua
como el hecho irremediable,
como el invierno que aguarda para oír
la risa de la escarcha doblegando rosas
en la eternidad muda de los pórticos.
 
La tierra que mira de vuelta al cielo
con el ojo profético del Sahara
es el hogar de los espejismos,
la estirpe rabiosa del viento
que arrastra
el deshilvanado sueño de la soledad.
 
Como gatos de Schrödinger
en la disyuntiva del microcosmos
vivos o muertos por un designio
sin brújulas en el país binario
del equinoccio
y el angelical desvarío de los átomos.
 
Después de todo tendría que venir
el vacío con su voz terrible
carcomiendo la pompa de los tronos,
el silencio dormido en los espejos
donde relumbra la belleza
que se marcha levantando polvo
como el despegue aparatoso de los coleópteros.












































Picture

SEBASTIÁN NÚÑEZ TORRES (Santiago de Chile, 1984). Poeta, docente e investigador académico. Director de la revista Vórtice. Licenciado y Magíster en Lengua y Literatura. Actualmente es candidato a Doctor en Literatura en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. Ha publicado El bosque de los ausentes (2015) y Las arpas rotas (2020). Sus poemas y artículos han sido publicados en diversas revistas literarias y una parte de su obra ha sido traducida al inglés.
1 Comentario

JORGE PÉREZ CEBRIÁN

13/2/2022

3 Comentarios

 
LA MÚSICA Y EL MUNDO
 
Como una profecía entre los dedos,
como un acorde,
así tiemblan los muros de la historia.
 
Y se apagan las luces.
                                                                      Y se callan.
 
A salvo
de hallar sobre sus rostros la vergüenza,
o la confusa sangre
                                                                      o el pecado,
ven la herida
vertiendo su promesa de un instante:
 
como si fuera cierto, el mundo acaba.
 
De sobra saben que es inútil
—qué crimen saciaría tanta culpa—.
Y saben que tan sólo son humanos.
 
Pero no importa.
 
Existe la mentira y también saben
 
que en este instante, aquí,
                                                                               la vida ocurre.
 
Y entonces, por encima del silencio
—de todos los silencios— algo pasa.
 
Una nota destrona la vigilia.
 
Una nota
 
temblando en la victoria de la carne.

DESPUÉS DEL FIN
 
La engendrará la Noche como un sueño.
 
Puedo oírla,
caminando descalza, en la madera:
el grito más antiguo que oyó el mundo.
 
Pienso. Y pienso quizá, el peso del frío,
o el último botón y los cordones,
o el dedo sobre el sello en la garganta.
 
Pienso la tarde triste,
el polvo del cemento alzándose,
colgando por los dientes del cordero,
un fin ante el que ceden los destinos.
 
Pienso que allí,
detrás de todo, tiembla inagotable
la sangre entre los dedos de la aurora,
sobre la arena justa, fiel y blanca.
 
Y escucho entonces: “ven.
Ven, tú que vives,
conocerás el fin como un recuerdo”.
 
Nada se oye.
 
Quizá porque es de día como un grito
y porque aún después del fin del mundo,
desde el último vientre de la Noche,
rugirá su desierto otra mañana,
 
invadirá la tierra un todavía.

JORGE PÉREZ CEBRIÁN (Requena, España, 1996). Actualmente cursa el grado de Filosofía en la UNED, disciplina que impregna la temática de sus poemas. Ha publicado La voz sobre las aguas (Valparaíso, 2019) y La lumbre del barquero (Olé, 2021). Fue coordinador de los eventos poéticos Las noches de Eleusis en Madrid. Algunos de sus poemas pueden leerse en revistas como Estación Poesía o 21veintiúnversos. En 2021 participó en la antología homenaje a Rafael Guillén Para decir amor sencillamente.
ALIQUIS ME FECIT
(ALGUIEN ME HIZO)
 
                                                                                                                                 Did he who made the lamb made thee?
                                                                                                                                     William Blake

 
En las orillas
de algún remoto río ya sin nombre
alguien ha hundido el rostro y
sólo llora.
 
Y lo sé:
habita todavía el tiempo,
sobre la suave sumisión del mármol,
la mano blanca
y el sudor perdido.
 
El suspiro, el dolor encadenado
debajo de una sombra de certeza,
el triste amor por el cobijo
tensándose en los hombros de los Atlas,
el grito y el fragor que llamo historia.
 
Existe un rastro invicto, existe
un hálito en el barro, una prisión,
la firma de quien ya no tiene nombre
y sabe que aún la muerte se arrodilla
si un hombre dice al mundo yo he vivido.
 
Un alma, una vida, un pasado
que habitan más las cosas que los cuerpos.
 
Y lo sé:
no existe una belleza tan desnuda,
que no diga en silencio alguien me hizo,
que no esconda en su piel algún temblor
clamando su otra sangre ya callada.
 
Y esta noche sin dueño sólo callo.
 
Acerco a ti mi cuerpo,
 
Y en este gesto exacto y temeroso,
profundo como la respiración
de un tigre,
como un cordero,
me pregunto.
 
Y es algo que me acerca al polvo alzándose
al vivo olor de la madera fresca.
 
Lo más cercano acaso
al misterio y la luz de una oración.
 
Cierro los ojos.
 
Y quizá alguien aún siga llorando
sentado junto a un río
ya sin nombre.

Picture
3 Comentarios

BELÉN LÓPEZ MARÍN

23/1/2022

3 Comentarios

 
A LAS MUJERES
 
Un hombre manso y bueno, cuando besa,
abre el pecho en mil nubes de algodones.
Entras rauda al refugio de vellones
y es un lecho de nata y de frambuesa.
 
Un hombre de seda es suave cuando apresa
tu carne y se derrama en sus rincones;
el hombre que presiona tus botones
es un hombre de sándalo y de fresa.
 
Un hombre, de repente, es un salvaje
y te quema su asalto de candela;
un hombre, cuando arroja su ropaje,
 
acorrala la lumbre de la vela,
y te duelen su piel y su equipaje
aunque quieras quererlo sin que duela.
Picture
Belén López Marín © María Peñalver

BELÉN LÓPEZ MARÍN (Murcia, España, 1975). Estudió Filología Hispánica en la UMU. Creció en la huerta de la pedanía de Cabezo de Torres. Actualmente, vive en Alhama de Murcia, donde trabaja como profesora en el Centro de Educación de Adultos. Ha publicado la plaquette La rosa entretenida (2019).

3 Comentarios

CARMEN SANCHO GUINDA

19/1/2022

1 Comentario

 
ESTA Roma perezosa y amarilla
me saluda con un guiño de tibieza
y yo, despierta apenas, le sonrío,
amanezco con ella,
espero a que su pulso y el mío se entrelacen
y al fin mis pupilas tardas se abandonan
a la hermosa suciedad de sus fachadas.
Callejean sin prisa, entre bocinas
y el sonido chillón de los vencejos.
Un halo de partículas de polvo
se disgrega al trasluz contra mi mano
y denso el cosmos mismo se suspende—ruinas, piel,
la ladera de un monte, el lecho de algún río—de la tenaz
                                                                                                  [cortina que cae
lenta, lloviendo cuanto queda de nosotros.
Me dices que se llama efecto Tyndall, que depende de los rayos
                                                                                                                            [incidentes,
que refleja y difracta, que explica el azul del mar y de los cielos.
Conque esto es permanecer, quién lo diría.
Danzar en un haz luminoso a la deriva,
cruzar de amanecida ventanales, ver qué aguarda
en el cuarto de hotel de una ciudad antigua,
cuyo abrazo dorado nos envuelve
constelando quizá entre emperadores, tribunos de otro tiempo,
el dueño de la trattoria de la esquina, transformados
en polvo, si bien no en el enamorado de Quevedo
ni en las letras de humo triste de Neruda, ya inmortales
y libres en estas luces esparcidas.
A ti, que amas lo medible, te pregunto
si existe una ecuación que reconozca
mi presencia y la tuya
en esta turbidez, si al ser llovidos
podremos tal vez posarnos, si tú sabrás quién soy cuando te roce
y yo quién eres tú, si el sedimento
que yo deje y tú dejes será uno, si es nuestro sino
flotar en coloidal errancia por el aire
pausados, sordos, ilesos,
sin más propósito que hacer visible
lo que fue y aún no es: lambda igual a uve por te
como certeza, esquiva al corazón pero fulgente.
Un credo, travieso y ambarino, en entropía,
acaso un pensamiento (siempre mejor que nada)
que brilla en medio del ruido de esta urbe, o un espejo
que ancestral y presunto nos desnuda.
O un vitelo liviano que nos salve.
Puede que un viejo acertijo de tu infancia.
QUIERO hacer una defensa de lo lábil.
Abogo, como Brecht, por lo caduco,
por lo que se cuartea y desportilla,
por la herrumbre, el desflecado, el descosido,
por aquello que exhibe mellas o se abolla
y ha pasado, si puede ser, por muchas manos.
Me inclino por lo que se degrada y se desgasta,
lo que se decolora y pierde forma,
por el verbo raído, la palabra usada hasta
                                                                          [la quiebra,
el fragmento y la esquirla que retoñan
en mi cuévano de sílabas ajadas.

RARO espécimen,
me digo,
te mereces la más bella ceremonia
porque vives, eres tú
en este lugar y tiempo dados.
Estás exactamente donde debes
y no te pierdes nada en otra parte,
ni tampoco en una época distinta
habrías sustraído más momentos
al colmado racimo de la vida.

VERSIFICAR la realidad
es como insuflar aire en los pulmones,
destilar agua en las branquias,
lanzar luz sobre las hojas de algún árbol,
tocar suelo
y levitar después con el impulso
contemplando la vida desde arriba
y muy adentro, con nacientes ojos,
con mirada de pupila atenta y nueva
y párpado cerrado al mismo tiempo,
con plegarias paganas en la boca, entretejidas
en sutiles filamentos de palabras
sacras, sueltas y a la vez sujetas,
a punto de salir de su mandorla.
Así de necesario es un poema.

Picture
CARMEN SANCHO GUINDA (Madrid, España, 1963). Su Trayectoria es académica, no literaria. Enseña Comunicación Académica y Profesional en la Universidad Politécnica de Madrid desde hace treinta años y hasta ahora solo ha publicado dentro del campo de la Lingüística. Estos cuatro poemas pertenecen, cada uno, a cuatro poemarios inéditos: Lábil, Y sin embargo ahora, Confinábulo y De recóndita urbe.

1 Comentario

RIYA MOHAN

30/11/2021

5 Comentarios

 
LA IDEOLOGÍA
 
de pie, entre una miríada de personas,
donde nace la locura incluso antes de que esté ahí,
me quedo quieta,
clavada a la multitud
como fotografías en una valla publicitaria
 
me aprietan fuerte
me sujetan a ella
a esa cosa
               por ahí
llamada ideología
que gobierna su mente
impulsa mi cuerpo
desde la ciencia y sus ologías.
 
bajo una luz verde y una presencia inquietante
cada parte de mi cuerpo es observada
cada parte de mi carne es examinada
con lentes de aumento
cada célula de inteligencia, belleza y género
se estudia minuciosamente
como la ciencia y su objetividad
calculando el amor por metro cuadrado
el trauma por violencia y
la sexualidad por ciclos.
 
me sujetan a ella
a esa cosa
               por ahí
que me impide ser una disidente
así que no puedo, simplemente no puedo
moverme hacia la izquierda o la derecha
permanezco clavada en el centro
toda la vida, controlada
hasta la eternidad, condicionada
por una entidad
llamada ideología.
Imagen

RIYA MOHAN (Nueva Delhi, La India). Actualmente reside en Reino Unido. Estudió español y, de vez en cuando, escribe poesía en nuestro idioma, como es el caso. Es Graduada en Literatura Inglesa por la Universidad de Delhi y ahora es estudiante de Relaciones Internacionales de las Américas en la UCL (University College London). Recientemente fue premiada en el “Concurso de microrrelatos y poesía”, convocado por el Instituto Cervantes de La India.
El poema ‘La Ideología’ es inédito.
5 Comentarios

ALBA SEOANE

15/11/2021

1 Comentario

 
AD AETERNUM
 
Inmóvil en el presente,
eligió una mueca disfrazada,
un rostro nuevo que le diera algún valor.
Supurante de heridas e historia,
el temblor de su piel rugosa
podría parecerse al miedo.
Más franco era su leño
que todos los besos del mundo.
Sobre su lecho perduraba,
firme y álgido en su existencia.
Había asumido la vejez pero nunca llegaba,
se resignaba a soportar los embistes del tiempo.
Paciente,
el árbol
esperaba con cariño las primeras flores
como una madre solícita
espera la primavera.

Imagen
ALBA SEOANE (Cartagena, España, 1981). Actualmente vive en Barcelona, donde es traductora e intérprete de cinco idiomas. Es una apasionada del Psicoanálisis. Ha publicado los libros de poemas De tu boca, el despertar (2014) y Todas las primaveras son pecado (2016). Este poema es inédito.
1 Comentario

PEDRO ALCARRIA

24/10/2021

1 Comentario

 
THE END
 
Soñé que se había arruinado.
 
El bebé más perfecto,
el policía del Belén.
 
Que recoge las maletas
del andén y sube.
 
Intentando una descompuesta
pirueta sobre el estribo.
 
Y el guardagujas contiene el aliento
por cortesía.
 
Que impropio como la irrupción
de un viejo amante,
 
es el momento de decir
una frase,
 
murmurar entre dientes
un gruñido de dolor,
 
trascendente.
 
Y di algo, se dice callando
en un tren en marcha,
 
di algo o ríe y de pronto
le apremia el aleteo
 
de un periódico
en la ventana.
 
Que aturdido ve marchar
las estaciones,
indefenso.
 
La nariz húmeda,
los ojos desquiciados.
 
Y en la vida todo desánimo es culpable
dice al fin,
 
y más inapelable que el destino
me espera el bar,
 
y un cóctel con demasiada
ginebra.
 
Que chasquea los nudillos
y se da por satisfecho,
 
y retira dos hebras de tabaco
egipcio de su corbata.
 
Que impecable el aspecto,
e imperceptible toda emoción,
 
anda escorado tropezando
con una horda de alpinistas,
 
y anarquistas y niñeras
paciendo su rebaño.
 
Que hasta aquí hemos llegado se dice
alcanzando un taburete,
 
y esperando una mano mejor
y tratando de recobrarse,
 
de su estricta avidez
su deseo despiadado
 
que huyendo intactos del
Gran Hotel Casino de ***
 
le han traído hasta aquí
en mi sueño,
 
donde firme el pulso
lanzó su vida como una moneda.
 
Que marcha usando la piel
de pagaré o salvoconducto.
 
Que en la piel desnuda y hostigada
la herida intacta intransigente,
 
y más y más abierta
de los años le alivia.
 
Porque esa herida es
la piel precisa que afirma.
 
Que en soledad la decepción
le aviva y traga
 
como un nudo en la garganta
el recuerdo
 
de una voz mezquina y altanera
“Gana la banca”
 
Y los jugadores, la ruleta,
las miradas de amor y compasión.
 
Que impávido en su asiento
contempla con desdén
 
las blancas manos
del croupier.
 
Que oculta su mirada
la máscara de su sonrisa
 
y el humo extravagante
del cigarro.
 
Soñé que torres altas,
espadañas azuladas,
 
acantilados oscuros,
 
cruzando el teatro
estroboscópico de la ventana,
 
saludan en la sacudida huida
a medianoche
 
al general de mazapán,
el más manso y suave corazón.






Imagen
PEDRO ALCARRIA (Barcelona, España, 1975). Es traductor, guionista radiofónico y fotógrafo para publicaciones científicas en el campo de la Historia del Arte. Ha publicado los siguientes títulos: El dios de las cosas tal y como deberían ser (ArtGerust, 2015) y Camada (Vitruvio, 2021). También ha publicado poemas en revistas como tActe Barcelona, Almiar o Casapaís. Mantiene la bitácora Cocinando chacales.

1 Comentario

ADOLFO MARCHENA

12/10/2021

1 Comentario

 
HAY algo oculto
en el grito y el murmullo,
en el barro que toma
forma y sabotea la mano
que esculpe lo prohibido.
Hay un misterio
en todas las estatuas
y el momento
en que se inicia el camino
y tú lo detienes todo.
Alguien cabalga a lomos
de un caballo blanco
mientras los relojes abandonan
la certeza del momento.
El hipódromo y el motel cercanos,
donde te detendrás para evitar
la noche y su intemperie.
Hay algo que me recuerda
los espejos y los charcos,
su tránsito hacia la belleza
y lo perdido, en ese contemplarse
y calarse los zapatos, cuando
alguien pretende olvidar tu nombre
y sólo consigue masticar ortigas.

ADOLFO MARCHENA (Vitoria-Gasteiz, España, 1967). Dirigió las revistas literarias Amilamia, Factorum y el fanzine Odaliana. Autor de Cartapacios de Lucerna, Proteo: el yo posible, La reconstrucción de la memoria, Musicalidad de los tejados y 683 Planta neurología. Ha sido incluido en diversas antologías como Sin embargo, Relatario, Voces del Extremo, Lírica Vasca-Ecuatoriana... Sus textos aparecen en revistas literarias electrónicas y de papel: El coloquio de los perros, Los Cuadernos del Matemático, Letralia, Baquiana, Río Arga, Turia, Agitadoras o Vuela Palabra. Sus últimos libros publicados son: En mi barrio no hay Quijotes y Sin cielo bajo los tejados.
Imagen
1 Comentario

ANDREA LÓPEZ KOSAK

29/9/2021

1 Comentario

 
TIEMBLO, como quien comprende. Un suspiro que intento para espantar. Mamá ocupa la cabecera, tiene el gesto descolorido. Deja caer un rulero en la sopa. Algo de mí nació de su jolgorio. Abro la boca y produzco un ruido corto, seguido de un tirón de lengua, cuando quiero preguntar a quién esperamos. Mamá advierte: somos las rotas para el descosido, y arrastra lejos de mí su miembro artificial.

TE quedaba lindo el verde, Adelina. El viejo te cortó una tarde de esas que ya no quedan. Te llevó tras el tapial, los pistilos embadurnados de calas para la virgen.
Tu cara convulsa, Adelina, sobre el pegote de pelos y polen, antes de la orden: comámosla.
Yo tiré mi muñeca al patio de al lado, para salvarla de los que a esa hora llegarían.
No puede ser que estuviera acostada y con los ojos abiertos, punto ciego del párpado movible, me dijiste, pero no jugabas.

LO amé como sólo una pobre loca. Un ramito de ojos de todos los colores le llevé. Ni siquiera los miró. Prefería abrirme con unas tenazas, amarrarme de la lengua, los tobillos, y mirar las decapitaciones de antes del anochecer.
¿Puede alguien oír este silencio animal? grité, mientras el viejo se inclinaba a besar el rosa del encaje.
Es hora, dijo.

Imagen
ANDREA LÓPEZ KOSAK (Bahía Blanca, Argentina, 1976). Ha publicado los libros de poemas Bailar sola (Universidad Nacional de La Plata, 2005); La tarea (Manual, 2011); Le dan hueso (Cinosargo, 2012); Leva (Literal, 2015); Indor (El ojo del mármol, 2015) y Mula blanca (Caleta Olivia, 2018). Acaba de ganar el III Premio Internacional Juan Rejano de Puente Genil con el libro Animales de costumbres, que muy pronto se verá publicado en la editorial española Pre-Textos. Mientras tanto, aquí mostramos tres poemas de El jardín de las licencias (Prueba de Galera, 2021), su último libro hasta el momento.
1 Comentario

JORGE VELASCO BALERIOLA

12/7/2021

3 Comentarios

 
GODZILLA EN EL BARRIO ROJO
 
voy a caminar sólo por Shinjuku durante horas
y por el camino me haré dos selfies
uno en la sede del partido comunista de Japón otro
con Godzilla en el barrio rojo. me acuerdo de ti
el Sol se oculta entre las nubes. por la noche conozco
a un negro. se llama Karlton Spencer
y me dice Jorge we should go out at Golden gai.
vamos a Golden Gai. nos entrevistamos con los nipones.
pero su evasión es propia del ninja más avezado
y regresamos a los cubículos en confusión de
suntory regresamos a las burbujas de otras burbujas
como semiosferas imposibles. no dejo de pensar en ti
mi primera noche en Japón es tan tímida ya sé cómo
bautizar esta locura de cubículo
no puedo soportar esta imposición de letrero de
turista no quiero ser gaijin experimentando trazas de
cultura semi-vedada.
Estoy solo. da igual.
poco importa este imperio cerrado del signo.
quiero olvidarte y sé cómo
ya he bendecido el futuro porque
ahora vendrán hispanos amigos dementes
y siento que tal vez están diseminados por Osaka
o cogiendo trenes bala por todo el archipiélago
o en shinkansen bañando con sangre las playas
celestes durmiendo por suelos de monjes
enigma se alumbra entre cemento de oriente o
con la luz de los smartphones
y sé que pronto acudirán a la llamada
será entonces cuando diga good bye Karlton
diré farewell Karlton.
hoy vuelvo a caminar sólo por Shibuya
estoy dentro y más dentro de esta burbuja dreamwave
pienso en ti quiero olvidarte sé cómo

MONTE FUJI
 
Como todas las dermis
tu piel nació como un tractor de la corteza
trotabas terrestre antes de la era terciaria
y como volcán que eres has ido
registrando psiques entre el basalto
deglutiendo el amor en tu corona
el mismo amor que se enciende
en todos nuestros cuerpos
cóncavos desde el Homo Ergaster
tu misma llama
quemó los templos de madera
los más grandes jamás concebidos
templos donde ardieron monjes budistas
en Nara oh my dear is just a burning
memory pero lo he decidido
tu fuego quemará todas mis células
y cuando llegue tu tacto a mis células
será como quemar libélulas del carbonífero
saludaré como Gerión saludó a Empédocles
con saltos de euforia obsérvame
te estoy saludando deidad de la fiebre
QUE ALGUIEN ME SAQUE UNA MADRE DEL MARSUPIO
 
vine a Japón para ver si colmaba esta
ausencia (tantas horas de dibujos animados)
vine en busca del bolsillo de Doraemon
qué es mi deseo sino objeto a en lo oculto
del marsupio de ese gato azul.
Qué soy sino máquina deseante o nobita incandescente
hacia el volcán. Que las rocas me muerdan los talones.
(quisiera poder volar por el cielo azul)
No puedo no quedan volocópteros en las tiendas.
Todo lo que persigo es la lluvia que acaricia
mi chubasquero a los cinco años
deseo revolcarme en el patio llegar a casa
desnudarme orinar sentir el agua ardiente
del Onsen de mi Tía Nieves
(en retrospectiva primera sensación de deshielo)
mi primer baño termal fue de orina
la bola genki mi primera intuición del
socialismo qué es mi deseo sino regresar a un
lugar donde Doraemon puede hacer que se
cumplan todos mis sueños tus sueños sus
sueños tal vez mi madre sea Doraemon
tal vez la televisión sea mi madre
tal vez Doraemon hablando en valenciano
sea mi madre
tus sueños sus sueños mis sueños son
mágicos que por favor saque del marsupio un
cuerpo que ese cuerpo sea un cuerpo de mujer
quiero regresar a un lugar donde sentirme
seguro lugar dentro del marsupio muy lejano
de mundos colapsados depresión capitalismo

Imagen
JORGE VELASCO BALERIOLA (Cartagena, España, 1993). Reside en Madrid, es profesor de Historia y se dedica a la investigación en Historia Moderna. Actualmente compagina su labor como docente e investigador con el estudio de la Filosofía. Ha publicado poemas y relatos en algunas revistas literarias españolas e hispanoamericanas como Drugstore o Alborismos. Su primer libro de poemas, Nostalgia Google Earth, verá la luz en 2022. Estos tres poemas inéditos no pertenecen a ese libro.

3 Comentarios

JULIO CÉSAR FÉLIX

2/7/2021

9 Comentarios

 
QUIÉN HACE TANTA BULLA
(Mínimo homenaje a César Vallejo)
 
Y aquí es donde nos reinventamos
con el diálogo del Sol
y las presencias de tantas paletas
que ocultan el verdadero sabor del dulce.
El juego de las armónicas de juguete
y tu espalda de carrusel
mantienen el bosque perfumado de fantasía
y música:
los poros se abren al alba del Cortés
y el tufo de almejas chocolatas inundan
la mañana extendida
en brazos y manos;
en ojos y aromas...
Y la península párase
por la espalda, abozalada, impertérrita
en la línea mortal del equilibrio.

Imagen
JULIO CÉSAR FÉLIX (Navolato, México, 1975). Vive en Coahuila desde 2004. Estudió Letras Hispánicas en la UNAM. Es autor de varios libros de poesía, entre ellos Nacimos irritilas en el acuario del mundo (Andraval, 2013). De 2020 es su plaquette Todavía hay un mar por cruzar para que yo invente mis pulmones.
9 Comentarios

JAVIER CLAURE COVARRUBIAS

27/6/2021

1 Comentario

 
MULTIPLICANDO POETAS
 
Señoras y señores
presten buena atención
de hoy en adelante los poetas son:
tragasillas, sueñajardines, rompeplatos,
besatumbas y limpiaestrofas
 
Poetas con lápiz cebolla
poetas con pantalla bisturí
poetas con aceitunas
poetas paredes de un teatro
poetas alacranes rojos
poetas dinamitas en la mampara
 
Los cebollentos plastificados
contrabandean lágrimas de cuerpos vivos
vigilantes que observan de reojo
y se retraen como uñas
que desgarran la carne
 
Siendo graffiti del año 2000
de algún modo
en el escote de las solteronas
en asambleas de campesinos, mineros y fabriles
en la transmisión del mando
en los periódicos
en lo cóncavo y convexo
en emisoras de agricultores y universitarios
discursan poetas
golpeando el techo de un palacio gubernamental
 
¡Aceituneros de canastas verdes y negras
despertad a más poetas de mi tierra
a los héroes que deambulan sin rumbo!
poetas rostrodisfrazado
poetas espirales del ombligo
poetas multitud errante
poetas pentagramas desconocidos
poetas soldadura autógena
poetas de la historia y la verdad
 
Señoras y señores
de hoy en adelante los poetas son:
los que esperan que llegue la madrugada
los que tienen dedos fosforescentes
los que asaltan sombras de catedral
los que tienen verbos en los nervios
los que arquean briznas encendidas
 
Ha de haberse hecho ahora el cielo
con la presencia de los poetas
 
Ya quemé las cartas de amor
cuando el mundo caía a mis espaldas
ya destrocé los altavoces
cuando los autos piteaban limosna
Perdón si repito. No puedo continuar
hay mucha agua potable bajo mis pies.
Imagen

JAVIER CLAURE COVARRUBIAS (Oruro, Bolivia, 1961). Ejerce el periodismo cultural. Ha estudiado Informática, Matemáticas, Pedagogía y Sociología en universidades suecas como la Kungliga Tekniska Högskolan, la Universidad de Uppsala y la Universidad de Estocolmo. Formó parte de la redacción de las revistas literarias Contraluz y Noche literaria. Ha publicado, entre otros, los libros Con el fuego en la palabra (2006), Extraño oficio (2010) o De Escandinavia a Los Andes (2016) junto a Mario Castro Navarrete y Carlos Alberto Muñoz.

1 Comentario
<<Anterior
Siguiente>>

    POESÍA

    El Coloquio de los Perros.
    Revista de Literatura.
    ISSN 1578-0856



    ABREU LÓPEZ, ANDREA

    ADÓN, PILAR

    ADRADA DE LA TORRE, JAVIER

    AGUILAR CÁRDENAS, JUAN FERNANDO

    AGUILAR RODRÍGUEZ, ANTONIO

    ALBORNOZ, GEMA

    ALCARAZ, JOSÉ

    ALCARRIA, PEDRO

    ALEXANDRESCU, IOANA

    ALFARO GARCÍA, ANDREA

    ALONSO, MARTHA ASUNCIÓN

    ÁLVAREZ, ISRAEL

    ÁLVAREZ KOKI, FRANCISCO

    ANDREÑUK, DAMIÁN

    AQUINO, WALTER

    ARGÜELLES, HUGO

    ARIDJIS, HOMERO

    ÁVALOS DÍAZ, ROLY

    AULICINO, JORGE

    BAEZA, LAURA

    BARRIO (DEL), MANUEL

    BÉJAR, JULIO

    BELLIDO, ÁLVARO

    BERNAL, ADRIÁN

    BERNARDEAU, LUIS

    BONILLA, GSÚS

    BURSET CATINCHI, JEAN G.

    CABELLO, CÉSAR

    CÁCERES, ERNESTO

    CALERA, JUAN

    CAMACHO, CARMEN

    CAMARASA, RAFAEL

    CAMPUZANO, CLEOFÉ

    CÁNAVES, JAVIER

    CARAZA, XÁNATH

    CARBAJOSA, NATALIA

    CARTAGENA, LEÓN

    CASADO, MARINA

    CASTELAO-GÓMEZ, ISABEL

    CASTRO, ÓSCAR PAÚL

    CHELLE, FERNANDO

    CHESSA, ALBERTO

    CHICO, ÁLEX

    CISNERO, ALBERTO

    COBOS CRUZ, XIMENA

    CÓRDOBA, RAÚL

    CORMORÁN, URIEL

    CORTÉS, FRANCISCO

    COSTELLO, ANNIE

    COURTOISE, RAFAEL

    CRESPO, CARMEN


    CRUZ, ANTONIO

    DEL CASAL, REBECA

    DÍAZ, MARCELO

    DÍAZ ALTOZANO, PAULA

    DÍAZ MARQUIEGUI, DANIEL

    DÍAZ OSPINA, JHONNY

    DÍEZ, JOSÉ MANUEL

    DÍEZ, VÍCTOR M.

    ESPEJO, JOSÉ DANIEL

    ESQUIVIAS, ÓSCAR


    FALCATA, JOAN

    FERNÁNDEZ, RAQUEL

    FERNÁNDEZ, VÍCTOR HUGO

    FERRO, SARA

    FILADELFO, JOSÉ

    FONT, VIOLETA

    FRANCO GONZÁLEZ, LUIS

    FRANS, CRISTIAN

    FRESCO, ISABEL

    GAGO, IGNACIO

    GALLARDO, JOSÉ MANUEL

    GARCÍA, DIEGO L.

    GARCÍA CASTRO, FRANCISO

    GARCÍA CERDÁN, ANDRÉS


    GARCÍA CUEVAS, ANDRÉS Mª

    GARCÍA DE MESA, ROBERTO

    GARCÍA JOVER, RAFA

    GARCÍA RODRÍGUEZ, ANÍBAL

    GARCÍA ZAMBRANO, MARÍA

    GIGLIO, PAULA

    GOLDARACENA, INAXIO

    GÓMEZ OLIVARES, CRISTIÁN

    GONZÁLEZ, JOSÉ JAVIER

    GONZÁLEZ DE OZAETA, MARA

    GONZÁLEZ MORA, JUAN JOSÉ


    GONZÁLEZ ORTEGA, JOSÉ MARÍA

    GORRÍA, ANA

    GUERRERO CABRERA, MANUEL

    GUICHARD, LUIS ARTURO

    GUIJARRO, ÁLVARO

    GUTIÉRREZ GONZÁLEZ, FRANCISCO

    HERNÁNDEZ, ENZZO

    HERNÁNDEZ, GALA

    HERNÁNDEZ ZURBANO, CARMEN

    HERRERA, PACO

    HERRERA PERALTA, SARA

    HUERTA SÁNCHEZ, ANTONIA

    IGLESIA, CARMEN

    INDI, RAFAEL

    LARRINAGA, CARMEN

    LEITES, MARCELO

    LÉRIDA, ALEJANDRO

    LÓPEZ. LARA

    LÓPEZ, MILAGROS


    LÓPEZ FERNÁNDEZ, PEDRO

    LÓPEZ KOSAK, ANDREA


    LÓPEZ LLORENTE, JORGE

    LÓPEZ MORALES, MARÍA

    LOUZAO, ALICIA

    LOZANO BELANDO, SAÚL

    LUNA, INMA

    MACHUCA, LUIS

    MARCHENA, ADOLFO

    MARÍN, MARÍA

    MARÍN FALLAS, VICTORIA

    MARTÍN DE LAS MUELAS, ANTONIO

    MARTÍNEZ AZORÍN, MARIA

    MARTÍNEZ CLARES, JOSÉ LUIS

    MARTÍNEZ GARRIDO, DAVID

    MATUSKA, DAVID

    MÉNDEZ GONZÁLEZ, IVÁN

    MEZA, FRANCISCO

    MÍNGUEZ ARNÁIZ, ITZIAR

    MIRALLES, BEATRIZ

    MIRANDA, JOSÉ ANTONIO

    MIRANDA, MARCELO

    MOHAN, RIYA

    MOLINA MONTEAGUDO, CONSTANTINO

    MOLINERO, JORGE M.

    MORANO, CRISTINA

    MORANTE, JOSÉ LUIS

    MOYA, ANA PATRICIA

    MURES, MARÍA JOSÉ

    NICOLÁS, VIOLETA

    NIETO TAVIRA, CHRISTIAN

    NORIEGA-BOZOVICH, CECILIA

    NÚÑEZ TORRES, SEBASTIÁN

    NUÑO, SIHARA


    ORDAZ, ISABEL

    OJEDA, MÓNICA

    ONETTI, MANUEL

    ORONA, IRASEMA

    OROZCO, CARMEN ROSA

    ORTEGA GONZÁLEZ, JOSÉ MARÍA

    PABA, NORMAN

    PÁRRAGA, ALICIA

    PASTOR, JOSÉ

    PAZ, EMILIO

    PEÑA DACOSTA, VÍCTOR

    PÉREZ. ALEJANDRO

    PÉREZ LÓPEZ, MARÍA ÁNGELES

    PÉREZ SÁNCHEZ, BAETRIZ

    PÉREZ URIBE, WILSON

    PINA, ALEJANDRA

    PIQUERAS, CARMEN


    PRAENA, ANTONIO

    QUÍLEZ, CECILIA

    QUINTANA, MARIO

    QUINTO, RAÚL

    RAMÉNTOL, MARIAN

    RAMÍREZ, BYRON

    RANEA, NAZARET

    REAL, MIGUEL-ANGEL

    REYES, JONATÁN

    RIVAS, JOSÉ ANTONIO

    RIZZI, MARCELO

    RODRÍGUEZ, ENDER

    RODRÍGUEZ, JOSEP M.

    ROMÁN, ELENA

    ROSMARINE, MARCOS

    ROSSELL, XAVI


    RUEDA, BEGOÑA M.

    RUIZ, JUAN PEDRO

    RUIZ DE VIÑASPRE, NURIA

    RUIZ MACIÁ, TERESA

    SALAS, SEAN

    SÁNCHEZ, MELINA

    SÁNCHEZ HIDALGO, TOMÁS

    SÁNCHEZ MARTÍN, LUIS

    SÁNCHEZ MENÉNDEZ, JAVIER

    SANCHO GUINDA, CARMEN

    SANTIAGO, NILTON

    SANTOS, ABEL

    SCHUTZ, LOLA

    SECCHI, PABLO

    SEGUÍ, PABLO

    SIERRA GARCÍA, EMILIO

    SILVA, ELDER

    SILVA REY, ALICIA

    SILVEIRA, CECILIA

    SILVERIO, ROSA

    SOTO RAMÍREZ, ALEXIS


    SZWARC, SUSANA

    TARANCÓN ROYO, HÉCTOR

    TERRÓN, SILVIA

    TORRES NIETO, MANUEL

    TRIGOS BAENA, MANUEL FABIÁN

    TRINIDAD GÓMEZ, ELENA

    VALLECILLOS, TIRSO PRISCILO

    VALVERDE, ÁLVARO


    VARELA, PEDRO DIEGO

    VARGAS, IRIS MÓNICA

    VÁSQUEZ, JUAN CARLOS

    VAZ, EVA

    VICENCIO, ALDO

    VIDAL GUARDIOLA, NATXO

    VILA FRANCÉS, ALFONSO


    VILLARROYA, MARÍA JOSÉ

    VINUEZA, HUMBERTO

    VIVAS, JOSÉ MANUEL

    VIZCAÍNO GUILLÉN, PABLO

    URBINA, ELÍ

    URÍA, JUAN MANUEL

    WITTNER, LAURA

    XIFRÉ, DAVID

    ZAPICO, FELIPE


    ArchivOs

    Agosto 2023
    Julio 2023
    Junio 2023
    Mayo 2023
    Marzo 2023
    Febrero 2023
    Enero 2023
    Diciembre 2022
    Noviembre 2022
    Agosto 2022
    Julio 2022
    Mayo 2022
    Marzo 2022
    Febrero 2022
    Enero 2022
    Noviembre 2021
    Octubre 2021
    Septiembre 2021
    Julio 2021
    Junio 2021
    Mayo 2021
    Abril 2021
    Marzo 2021
    Enero 2021
    Diciembre 2020
    Noviembre 2020
    Octubre 2020
    Septiembre 2020
    Julio 2020
    Junio 2020
    Mayo 2020
    Abril 2020
    Marzo 2020
    Febrero 2020
    Enero 2020
    Diciembre 2019
    Noviembre 2019
    Octubre 2019
    Septiembre 2019
    Agosto 2019
    Julio 2019
    Junio 2019
    Mayo 2019
    Abril 2019
    Marzo 2019
    Febrero 2019
    Enero 2019
    Diciembre 2018
    Noviembre 2018
    Octubre 2018
    Septiembre 2018
    Agosto 2018
    Julio 2018
    Junio 2018
    Mayo 2018
    Abril 2018
    Marzo 2018
    Febrero 2018
    Enero 2018
    Diciembre 2017
    Noviembre 2017
    Octubre 2017
    Julio 2017
    Junio 2017
    Mayo 2017
    Abril 2017
    Marzo 2017
    Febrero 2017
    Enero 2017
    Diciembre 2016
    Octubre 2016
    Septiembre 2016
    Julio 2016
    Junio 2016
    Mayo 2016
    Abril 2016
    Marzo 2016
    Febrero 2016
    Enero 2016
    Noviembre 2015
    Octubre 2015
    Septiembre 2015
    Agosto 2015
    Julio 2015
    Junio 2015
    Mayo 2015
    Marzo 2015
    Febrero 2015
    Enero 2015
    Diciembre 2014
    Noviembre 2014
    Octubre 2014
    Septiembre 2014
    Agosto 2014
    Junio 2014
    Mayo 2014
    Abril 2014
    Marzo 2014
    Febrero 2014
    Enero 2014


    CategorÍAs

    Todo
    Abel Santos
    Adolfo Marchena
    Adriana Manuela
    Adrian Bernal
    Alberto Chessa
    Alberto Cisnero
    Aldo Vicencio
    Alejandra Pina
    Alejandro Perez
    Alex Chico
    Alexis Soto Ramirez
    Alicia Louzao
    Alicia Parraga
    Alicia Silva Rey
    Alvaro Bellido
    Alvaro Guijarro
    Ana Patricia Moya
    Andrea Abreu López
    Andrea Alfaro Garcia
    Andrea Lopez Kosak
    Andres Garcia Cerdan
    Andres Maria Garcia Cuevas
    Annie Costello
    Antonio Cruz
    Antonio Huerta Sanchez
    Antonio Martin De Las Muelas
    Antonio Martin De Las Mulas
    Antonio Praena
    Beatriz Miralles
    Beatriz Perez Sanchez
    Begoña M Rueda
    Belen Lopez Marin
    Byron Ramirez
    Carlos Javier Corral Lopez
    Carmen Camacho
    Carmen Crespo
    Carmen Hernandez Zurbano
    Carmen Iglesia
    Carmen Larrinaga
    Carmen Piqueras
    Carmen Rosa Orozco
    Carmen Sancho Guinda
    Cecilia Quilez
    Cecilia Silveira
    Celia Martinez Saez
    Cesar Cabello
    Charo Guarino
    Christian Nieto Tavira
    Cleofe Campuzano
    Constantino Molina Monteagudo
    Contra Este Mundo
    Cristian Frans
    Cristian Gomez Olivares
    Cristina Casado Alcalde
    Damian Andreñuk
    Daniel Diaz Marquiegui
    David Martinez Garrido
    David Matuska
    David Trashumante
    David Xifre
    Diaz Ospina
    Diego L Garcia
    El Coloquio De Los Perros
    Elder Silva
    Elena Roman
    Emilio Paz
    Emilio Sierra Garcia
    Emma Gomis
    Ender Rodriguez
    Erika Preciado
    Ernesto Caceres
    Ewal Carrion Diaz
    Felipe Zapico
    Fernando Chelle
    Francisco Alvarez Koki
    Francisco Cortes
    Francisco Garcia Castro
    Francisco Gutierrez Gonzalez
    Francisco Herrera
    Francisco Meza
    Gabriel Insausti
    Gala Hernandez
    Gema Albornoz
    Gsus Bonilla
    Guillermo Rebollo Gil
    Hector Tarancon Royo
    Helena Mariño
    Homero Aridjis
    HUMBERTO VINUEZA
    Ignacio Gago
    Inaxio Goldaracena
    Inma Luna
    Ioana Alexandrescu
    Irasema Orona
    Iris Monica Vargas
    Isabel Castelao Gomez
    Isabel Fresco
    Isabel Ordaz
    Itziar Minguez Arnaiz
    Ivan Mendez Gonzalez
    Javier Adrada De La Torre
    Javier Cánaves
    Javier Cánaves
    Javier Sanchez Menendez
    Jean G Burset Catinchi
    Joan Falcata
    Joaquin Campos
    Johnny Diaz Ospina
    Jonatan Reyes
    Jorge Lopez Llorente
    Jorge M Molinero
    Jorge Perez Cebrian
    Jorge Velasco Baleriola
    Jose Alcaraz
    Jose Angel Valente
    Jose Antonio Miranda
    Jose Daniel Espejo
    Jose Filadelfo
    Jose Javier Gonzalez
    Jose Luis Martinez Clares
    Jose Luis Morante
    Jose Manuel Diez
    Jose Manuel Vivas
    Jose Maria Ortega Gonzalez
    Jose Pastor
    Josep M. Rodriguez
    Juan Calera
    Juan Carlos Vasquez
    Juan De Beatriz
    Juan Fernando Aguilar Cardenas
    Juan Manuel Uria
    Juan Pedro Ruiz
    Julio Bejar
    Julio Cesar Felix
    Lara Lopez
    Laura Baeza
    Laura Wittner
    Leon Cartagena
    Luis Arturo Guichard
    Luis Bernardeau
    Luis Franco Gonzalez
    Luis Machuca
    Luis Sanchez Martin
    Luna
    Manuel Del Barrio Donaire
    Manuel Fabian Trigos Baena
    Manuel Onetti
    Mara Gonzalez De Ozaeta
    Marcelo Leites
    Marcelo Miranda
    Marcelo Rizzi
    Maria Angeles Perez Lopez
    Maria Garcia Zambrano
    Maria Jose Mures
    Maria Jose Villarroya
    Maria Lopez Morales
    Maria Martinez Azorin
    Marian Ramentol
    Marina Casado
    Mario Quintana
    Martha Asuncion Alonso
    Melina Sanchez
    Miguel Ipiña
    Milagros Lopez
    Monica Ojeda
    Natalia Carbajosa
    Natxo Vidal Guardiola
    Nazaret Ranea
    Norman Paba
    Oscar Esquivias
    Oscar Paul Castro
    Pablo Secchi
    Pablo Seguí
    Pablo Vizcaino Guillen
    Patricia Luque Pavon
    Paula Diaz Altozano
    Paula Giglio
    Pedro Alcarria
    Pedro Diego Varela
    Pedro Lopez Fernandez
    Pencho Lopez
    Pilar Adon
    Poesia
    Poesía
    Praena
    Quinto
    Rafael Algaba
    Rafael Camarasa
    Rafael Courtoise
    Rafael Indi
    Raul Cordoba
    Raul Quinto
    Rebeca Del Casal
    Riccardo Marzoli
    Riya Mohan
    Roberto Antonio Remedi
    Roly Avalos Diaz
    Rosario Troncoso
    Rosa Silverio
    Sara Ferro
    Sara Herrera Peralta
    Saul Lozano Belando
    Sebastian Nuñez Torres
    Selene Carolina Ramirez
    Silvia Terron
    Susana Szwarc
    Teresa Ruiz Macia
    Tirso Priscilo Vallecillos
    Tomas Lee
    Tomas Sanchez Hidalgo
    Uriel Cormoran
    Vicente Muñoz Alvarez
    Victor Hugo Fernandez
    Victoria Marin Fallas
    Victor M Diez
    Victor Peña Dacosta
    Violeta Font
    Walter Aquino
    Wilson Perez Uribe
    Xanath Caraza
    Xavi Rossell
    Ximena Cobos Cruz
    Xuan De La Vega

    Canal RSS

Con tecnología de Crea tu propio sitio web con las plantillas personalizables.